RESEÑA LIBRO FERNANDO SAVATER

  Seguro que alguna vez te han contado una anécdota histórica y te has preguntado por qué las clases de Historia del instituto no son igual de emocionantes. Al oír «historia» probablemente pienses en una línea del tiempo o en un aula llena de alumnos, y al oír «filosofía» pensarás en un griego vestido con una túnica o en el examen de Selectividad. Pero ahora queremos que olvides esos prejuicios y pienses en la filosofía como lo que es: el conjunto de posibles respuestas a esas preguntas (sobre la amistad, el amor, la muerte…) que todos nos hacemos de vez en cuando. Lo malo es que esas preguntas no tienen una respuesta sencilla; lo bueno, que algunos de los hombres más inteligentes de la historia también se las han hecho y han encontrado respuestas para todos los gustos.

Como anuncia el título, este libro no es de filosofía sino de historia de la filosofía. Eso significa, por un lado, que conoceremos las respuestas de los filósofos más importantes de todos los tiempos y, por otro, que además descubriremos algunas de esas interesantes anécdotas históricas que comentábamos al principio. A veces la mejor manera de conocer a un filósofo es analizar su modo de vida o cómo eligió morir y, a veces, como bien sabe el autor de este libro, conviene mencionar ese tipo de detalles para mantener entretenido al lector y darle un respiro entre teoría y teoría. En Historia de la Filosofía sin temor ni temblor, Fernando Savater resume las principales teorías filosóficas relacionándolas entre sí. Lo más interesante de este libro es precisamente eso: ver cómo ha ido evolucionando la filosofía, cómo unas ideas han influido en otras y cómo, según la época

 se daban distintos enfoques a los mismos temas. Y también nos permite sacar conclusiones generales acerca de la filosofía; por ejemplo, que todos los filósofos aceptan (y predican) que no hay una única verdad o que, aunque pasen los siglos, los buenos filósofos nunca quedan desfasados. Para que la lectura no sea tan densa, la edición viene acompañada de ilustraciones y de una escena, al final de cada capítulo, en la que dos jóvenes dialogan sobre las teorías de cada época. Es muy interesante leer los puntos de vista de dos personajes del siglo XXI, pero a veces hay bromas y expresiones coloquiales de esas que los adultos piensan que los jóvenes usan, pero que en realidad no utiliza nadie (como «¡Toma castaña!» o «¡Claro, clarinete!»). En definitiva, un libro muy interesante, que puede servir tanto para tener un primer contacto con la filosofía como para repasar lo que ya sabemos y llenar esas lagunas que no deberíamos tener