Centrar la atención en los
estudiantes y en sus
procesos de aprendizaje.
Es necesario reconocer la diversidad social,
cultural, lingüística, de capacidades, estilos y
ritmos de aprendizaje que tienen; es decir, desde
la particularidad de situaciones y contextos,
comprender cómo aprende el que aprende y,
desde esta diversidad, generar un ambiente que
acerque a estudiantes y docentes al
conocimiento significativo y con interés.
Planificar para
potenciar el
aprendizaje
Potenciar el aprendizaje de los
estudiantes hacia el desarrollo
de competencias. Implica
organizar actividades de
aprendizaje a partir de
diferentes formas de trabajo,
como situaciones y secuencias
didácticas y proyectos, entre
otras.
• Reconocer que los
estudiantes aprenden a lo
largo de la vida y se
involucran en su proceso
de aprendizaje.
• Seleccionar estrategias didácticas que
propicien la movilización de saberes, y de
evaluación del aprendizaje congruentes con
los aprendizajes esperados.
• Reconocer que los referentes para
su diseño son los aprendizajes
esperados.
• Generar ambientes de aprendizaje
colaborativo que favorezcan
experiencias significativas.
• Considerar evidencias de desempeño que
brinden información al docente para la toma
de decisiones y continuar impulsando el
aprendizaje de los estudiantes.
Generar
ambientes de
aprendizaje
Se denomina ambiente de
aprendizaje al espacio donde se
desarrolla la comunicación y las
interacciones que posibilitan el
aprendizaje.
• La claridad respecto del aprendizaje
que se espera logre el estudiante.
• El reconocimiento de los elementos del contexto:
la historia del lugar, las prácticas y costumbres, las
tradiciones, el carácter rural, semirural o urbano del
lugar, el clima, la flora y la fauna.
• La relevancia de los materiales educativos
impresos, audiovisuales y digitales.
• Las interacciones entre los
estudiantes y el maestro.
Trabajar en
colaboración para
construir el
aprendizaje
El trabajo colaborativo alude a estudiantes y
maestros, y orienta las acciones para el
descubrimiento, la búsqueda de soluciones,
coincidencias y diferencias, con el propósito de
construir aprendizajes en colectivo.
• Que sea inclusivo.
• Que defina
metas
comunes.
• Que favorezca el
liderazgo compartido.
• Que permita el
intercambio de
recursos.
• Que desarrolle el sentido
de responsabilidad y
corresponsabilidad.
• Que se realice en entornos
presenciales y virtuales, en
tiempo real y asíncrono.
Poner énfasis en el
desarrollo de competencias,
el logro de los estándares
curriculares y los
aprendizajes esperados
La educación Básica favorece el desarrollo de
competencias, el logro de los estándares
Curriculares y los aprendizajes esperados,
porque:
Una competencia es la capacidad de
responder a diferentes situaciones, e
implica un saber hacer (habilidades) con
saber (conocimiento), así como la valoración
de las consecuencias de ese hacer (valores y
actitudes).
Los Estándares Curriculares son descriptores de logro y
definen aquello que los alumnos demostrarán al concluir
un periodo escolar; sintetizan los aprendizajes esperados
que, en los programas de educación primaria y secundaria,
se organizan por asignatura-grado-bloque, y en educación
preescolar por campo formativo-aspecto.
Los aprendizajes esperados son indicadores de
logro que, en términos de la temporalidad
establecida en los programas de estudio, definen lo
que se espera de cada alumno en términos de
saber, saber hacer y saber ser.
Usar materiales
educativos para
favorecer el
aprendizaje
Una escuela en la actualidad debe favorecer que la
comunidad educativa, además de utilizar el libro de
texto, emplee otros materiales para el aprendizaje
permanente; algunos de ellos son:
Acervos para la
Biblioteca escolar y la
Biblioteca de aula
Materiales
audiovisuales,
multimedia e internet.
Materiales y recursos
educativos
informáticos.
Evaluar
para
aprender
La evaluación de los aprendizajes es el proceso
que permite obtener evidencias, elaborar
juicios y brindar retroalimentación sobre los
logros de aprendizaje de los alumnos a lo largo
de su formación; por tanto, es parte
constitutiva de la enseñanza y del aprendizaje.
Favorecer la
inclusión para
atender a la
diversidad
La educación es un derecho fundamental y una
estrategia para ampliar las oportunidades,
instrumentar las relaciones interculturales, reducir las
desigualdades entre grupos sociales, cerrar brechas e
impulsar la equidad. Por lo tanto, al reconocer la
diversidad que existe en nuestro país, el sistema
educativo hace efectivo este derecho al ofrecer una
educación pertinente e inclusiva.
• Pertinente porque valora, protege y desarrolla
las culturas y sus visiones y conocimientos del
mundo, mismos que se incluyen en el desarrollo
curricular.
• inclusiva porque se ocupa de reducir al máximo
la desigualdad del acceso a las oportunidades, y
evita los distintos tipos de discriminación a los
que están expuestos niñas, niños y adolescentes.
Incorporar
temas de
relevancia
social
Se derivan de los retos de una sociedad que cambia
constantemente y requiere que todos sus integrantes
actúen con responsabilidad ante el medio natural y social,
la vida y la salud, y la diversidad social, cultural y lingüística.
Renovar el pacto
entre el estudiante,
el docente, la
familia y la escuela
Esto con el fin de promover normas que regulen la
convivencia diaria, establezcan vínculos entre los
derechos y las responsabilidades, y delimiten el
ejercicio del poder y de la autoridad en la escuela con
la participación de la familia.
Reorientar el
liderazgo
Esto implica un compromiso personal y con el
grupo, una relación horizontal en la que el diálogo
informado favorezca la toma de decisiones
centrada en el aprendizaje de los alumnos.
• La creatividad
colectiva.
• La visión de
futuro.
• La innovación para la
transformación.
• El
fortalecimiento
de la gestión.
• La promoción del
trabajo colaborativo.
• La asesoría y la
orientación.
La tutoria y la
asesoría
académica a la
escuela
La tutoría como la asesoría suponen un
acompañamiento cercano; esto es, concebir a la escuela
como un espacio de aprendizaje y reconocer que el tutor
y el asesor también aprenden.