El modelo educativo orienta la práctica de los actores de la formación para el trabajo (directivos, docentes, y personal de apoyo y asistencia a la educación), hacia la construcción de un ambiente institucional y de aprendizaje que propicie que las personas/estudiante desarrollen las competencias necesarias para incorporarse a los ámbitos económicos, laboral, social y cultural, o educativo.

El modelo educativo establece directrices para la intervención de la DGCFT en la diversidad del contexto social.

El paradigma del modelo educativo precisa el “debe ser” de la institución dentro de los límites y alcances de la política educativa asociada a la formación para el trabajo.

El Modelo educativo asume la importancia de la ampliación de las posibilidades de los saberes para todo y precisa la calidad y pertinencia de los aprendizajes.

El Modelo Académico orienta el esfuerzo individual y colectivo de la comunidad institucional en dos vertientes: el diseño curricular y la gestión educativa.

Los actores institucionales están comprometidos con su participación creativa e innovadora para operar con base a la filosofía institucional y enfoque educativo.

El Modelo Académico establece las estrategias metodológicas para el diseño y/o rediseño curricular con una visión humanista y de desarrollo social de la formación para el trabajo.

El Modelo Académico permite hacer la realidad el paradigma pedagógico, los propósitos institucionales establecidos en la misión, la visión de futuro implícito en el Modelo Educativo.

La Gestión educativa permite la implantación del Modelo Educativo y Académico de la formación para el trabajo.

En el MEyAc la Vinculación juega un papel muy importante para gestionar y consolidar de manera estratégica la formación para el trabajo