Las gradaciones, las fronteras difusas entre cateogorías y el papel central del significado y del uso del lenguaje son algunos de los pilares de esta teoría. Además, destacan las relaciones entre el lenguaje y otros sistemas cognitivos.
El mundo está compuesto de elementos variables, los seres humanos conseguimos aprehender la realidad por medio de mecanismos que nos permiten ordenar esos datos dispersos: el conjunto de tales operaciones de ‘simplificación’ se denomina categorización, y consta de la generalización y la discriminación. Por medio del primero, agrupamos elementos en categorías, a partir de sus rasgos comunes. El segundo nos permite diferenciar entre elementos similares. Ambos son complementarios e imprescindibles para el pensamiento.