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Nietzsche es considerado un "maestro de la sospecha" pues se aleja radicalmente de la búsqueda de la verdad única, se da cuenta de que lo se considera verdad, no es más que un acuerdo al que se llega por conveniencia práctica: son los propios seres humanos los que construyen sus verdades y se las creen. Por otro lado argumenta que es imposible la percepción correcta de los objetos y a lo se aspira es simplemente a mediar y a encontrar regularidades que reafirmen nuestras creencias. Tampoco se puede establecer un modo objetivo de verificar que tal o cual percepción es mejor que otra. El intelecto tampoco es seguro ni objetivo, está encaminado a reafirmar lo que se considera verdadero: la palabra, el lenguaje, los conceptos y metáforas son columnas en la arquitectura que el humano ha construido para sí mismo y que pretende hacer pasar por naturales y necesarias.
Para Nietzsche Para no existiría la “verdad en sí” porque no podemos conocer el en sí de las cosas ni sus esencias, más bien la verdad sería una serie de convenciones aceptadas, realzadas y adornadas poéticamente y retóricamente por una sociedad o sociedades específicas que ya están muy acostumbradas a considerar ciertos enunciados como legítimos, en pocas palabras, se aceptar que algo es así y no de otro modo: son ilusiones que se han olvidado que lo son o metáforas muy gastadas, convencionales y acordadas.
Según Nietzsche la verdad es un constructo humano que se ha olvidado que lo es y mediante la aceptación social se vuelve legítima y única. Todo conocimiento debe poder adecuarse y sostenerse dentro del sistema o “arquitectura” de conocimiento, pero sucede que el humano que busca un conocimiento, está limitado por su misma condición humana de la que no puede salir, y siempre encontrará regularidades que coinciden y hará a un lado lo no semejante, lo diferente, entonces, ¿sería posible descubrir algo en esas irregularidades que no coinciden y llegar a formar metáforas alternativas que mantengan su doble sentido, independientemente de que terminen formando parte de “lo verdadero”?
Un concepto:
"debe encajar al mismo tiempo con innumerables experiencias, por así decirlo, más o menos similares, jamás idénticas estrictamente hablando; en suma, con casos puramente diferentes. Todo concepto se forma por equiparación de casos no iguales. Del mismo modo que es cierto que una hoja no es igual a otra, también es cierto que el concepto hoja se ha formado al abandonar de manera arbitraria esas diferencias individuales, al olvidar las notas distintivas” (Nietzsche, 5-6)
Mentira: consiste en hacer aparecer lo irreal como real al abusar de las convenciones sociales aceptadas como verdad. Se considera inaceptable cuando se miente para ocasionar perjuicios o daños, en cambio, puede ser aceptada si prolonga la vida, es decir, se obtiene una consecuencia agradable.
Conducta estética: se trata de un ámbito o “esfera” intermedia entre el sujeto y el objeto, ya que los humanos no pueden tener percepciones correctas ni objetivas o puras de los objetos o “cosas en sí”, esta conducta es una fuerza que adecua o media las percepciones del exterior para poder poetizar e inventar coherentemente.
Metáfora: Hay dos diferentes, primero el humano forma una imagen mental del objeto del mundo exterior, segundo, esa imagen se transforma en sonido. Guardan algún grado de correspondencia con sus respectivos objetos. Estas conforman el lenguaje y las más convencionales conforman la verdad.
