A partir de la segunda mitad del siglo XVII y durante todo el siglo XVIII, aparecieron nuevas teorías económicas, ligadas a los intereses de la burguesía:
El librecambismo, con pensadores como Adam Smith y David Ricardo defendían el libre comercio internacional y la libre competencia, sin la intervención del Estado y sin limitaciones o prohibiciones que afectaran a los productos extranjeros. Es decir, rechazaba el proteccionismo que ejercía el Estado monárquico sobre la economía. Esta libertad económica, base del librecambismo, dio como resultado el capitalismo liberal, que se caracterizó por la propiedad privada de los medios de producción y por la búsqueda del máximo beneficio y de la acumulación creciente de capital.
EL PROTECCIONISMO
El proteccionismo era una doctrina propia de las monarquías de la época, para proteger el propio comercio, se imponían fuertes impuestos aduaneros a los productos extranjeros, que de este modo resultaban más caros. Uno de sus representantes más destacados fue Alexander Hamilton.
El modelo capitalista:
A medida que perfeccionaba su esquema económico en varios campos de la industria y producción de bienes y servicios, implantaba nuevos órdenes y conceptos de manejo y movimiento del mercado internacional.
El proteccionismo, en la etapa contemporánea:
representó un modelo de protección de la economía interna de cada país; es decir, los expertos económicos mencionaban que, para proteger la industria de sus propios países, era necesario incentivar su producción de modo que no se recurra a la competencia extranjera. La formar de desmotivar a la competencia extranjera era aplicar ciertos impuestos, tasas o gravámenes aduaneros, para que se opte por consumir los productos nacionales.
Entre los principios que rigen el proteccionismo destacan:
• Protección de las industrias consideradas estratégicas para el interés público.
• El fomento de la industrialización y creación de empleo.
• Desarrollo de industrias emergentes.
• Evitar el dumping externo.
LIBRECAMBISMO
El librecambismo, a partir de la idea liberal y las independencias de las naciones de Europa, surgió como parte del modelo económico capitalista, el cual fomentó el intercambio comercial entre países, eliminando los procesos aduaneros. El librecambismo se dio entre aquellas industrias que tenían un alto poder en el mercado internacional y los interesados en exportar los productos de estas empresas.
Smith sostuvo que el librecambismo es el intercambio, entre países, de bienes y materias primas sin restricciones del tipo de aranceles, cuotas de importación, o controles fronterizos. Esta política económica contrastó con el proteccionismo o el fomento de los productos nacionales mediante la imposición de aranceles a la importación u otros obstáculos legales para el movimiento de bienes entre países
Entre los principios que rigen el librecambismo destacan:
• Mayor eficiencia de los factores de producción.
• Mayor variedad y cantidad de bienes y servicios.
• Incremento y fomento de la competencia.
• Logro de economías de escala.
Filósofo y médico inglés (1632-1704), es considerado el padre del liberalismo clásico y uno de los principales autores de la Ilustración. En cuanto a teoría política, propuso que la soberanía emana del pueblo y que los derechos individuales son anteriores a la sociedad. En cuanto a la relación entre la economía y la política, afirmó que «La mayor y principal finalidad que persiguen los hombres al reunirse en Estados, sometiéndose a un gobierno, es la protección de su propiedad, protección que le es incompleta en estado de naturaleza».
JOHN LOCKE
ADAM SMITH
Cualquier hombre, mientras no transgreda las leyes de la justicia, es plenamente libre de seguir el camino que le señala su interés y de trasladar allá donde quiera su industria y su capital, compitiendo con los de cualquier otra clase de hombres. En el sistema de libertad natural, el soberano tiene tres obligaciones: primera, el deber de defender la sociedad contra todo acto de violencia o invasión de otras sociedades; segunda, el deber de proteger en lo posible de la injusticia y la opresión de otro miembro; y tercera, el deber de erigir y mantener ciertas obras y establecimientos públicos que el interés privado de un particular no podría jamás erigir y mantener.»
La Primera Revolución inglesa sucedió en 1642, cuando el rey Carlos I quiso imponer una monarquía absoluta en Inglaterra, lo que provocó la oposición del Parlamento y el estallido de la guerra civil. Bajo la dirección de Oliver Cromwell, los opositores al monarca triunfaron y Carlos I fue procesado y ejecutado. Con Cromwell se instauró una república. A su muerte, el Parlamento restableció la monarquía.