Atienden situaciones en las que existen problemas para masticar, tragar o deglutir, así como en situaciones en las que exista dificultad para digerir
Dieta de líquidos claros
Dieta terapéutica, transitoria, modificada en consistencia y limitada en contenido nutrimenta; si existe acceso por vía oral, esta dieta suele ser el primer recurso de alimentación cuando se quiere dar reposo al tracto gastrointestinal y obtener algún aporte de energía. Este tipo de dieta resulta insuficiente en cuanto a contenido de energía y nutrimentos esenciales para todos los grupos de edad.
Los líquidos utilizados en la dieta de líquidos claros deben tener una osmolaridad máxima de 250 mOsm/L, por lo que aquellos que rebasen esta cifra deben diluirse.
NOTA
No se recomienda su uso exclusivo por más de 72 horas por ser insuficiente en energía
Dieta de líquidos generales
Dieta terapéutica, modificada en consistencia e inadecuada en contenido nutrimental. Funciona como transición entre la diete de líquidos claros y la dieta suave; administra líquidos por vía oral a individuos incapaces de masticar, deglutir o digerir alimentos sólidos con el fin de cubrir sus necesidades energéticas. Proporciona alimentos en estado líquido o semilíquido a temperatura ambiente. También la componen alimentos que pueden ser llevados a consistencia líquida
NOTA
Si se emplea durante más de dos o tres días, deben añadirse suplementos nutricionales líquidos o alimentos pasados por licuadora para mejorar la calidad de la dieta desde el punto de vista nutricional. Esta dieta debe ser prescrita para un uso a corto plazo (<5 días).
Dieta puré
Incluye alimentos líquidos y sólidos fáciles de deglutir; debido a que son elaborados triturando, moliendo o cortando los alimentos con el fin de conseguir una textura fina. Es una de las dietas más utilizadas en hospitales y residencias de la tercera edad. Se pueden considerar todos aquellos alimentos que puedan molerse, la consistencia específica se establece dependiendo la tolerancia del paciente.
Características organolépticas en la preparación de la dieta:
• Sabor: se debe cuidar el sabor para que sea apetecible para el paciente.
• Textura: Fina sin fibras y sin pieles. La consistencia debe ser espesa para que se mantenga en la cuchara.
• Color: No incluir colores oscuros y mantener una variación de colores entre diferentes purés en la misma comida procurando una presentación atractiva.
• Aroma: Evitar olores fuertes para no ser rechazados por aquellos pacientes con sensibilidad olfativa.
• Temperatura: Se proponen temperaturas templadas
Dieta suave
Esta dieta provee una alimentación nutricionalmente completa y equilibrada. Suele indicarse en pacientes con el diagnóstico nutricio de “Dificultad para morder/masticar”. Se incluyen alimentos de consistencia suave con un elevado contenido de agua para facilitar la masticación y deglución. De acuerdo a la edad y sexo del paciente se debe individualizar su textura en función del paciente y del momento evolutivo de su enfermedad.
Alimentos que deben evitarse:
• Carnes excesivamente fibrosas.
• Pan tostado, tostadas, totopos y cereales de desayunos secos.
• Verduras crudas como zanahoria, pepino, jícama y cebolla.
Dieta para disfagia
La disfagia es la dificultad para deglutir los alimentos líquidos y sólidos, se puede clasificar según el lugar donde se presente (orofaríngea, esofágica, paraesofágica)
Según el grado de disfagia se deberá adoptar la consistencia de los alimentos sólidos o líquidos, modificando volumen, consistencia y textura.
Se encuentran las dietas líquidas, en las cuales podemos encontrar 3 tipos de viscosidad:
º Tipo néctar: Es la consistencia menos espesa, se caracteriza por ser delgado como el agua y ser fácilmente vertida al caer en forma de hilo fino.
º Tipo miel: Es un líquido que se define por ser más espeso que el tipo néctar, se caracteriza por su forma al caer en gotas gruesas y al no mantener su forma.
º Tipo pudín: Es la más sólida, conocida como puré o tipo túrmix, la cual provee una dieta completa basada en alimentos más variados siendo una buena fuente de calorías, proteínas, fibra y agua