En 1604, a la muerte de su padre, Luisa dejó Poissy para instalarse «en casa de una señorita devota». En esta pensión debió permanecer hasta los 21 años, es decir, poco antes de contraer matrimonio. Durante estos años (1604-1613), Luisa prosigue su formación humanística y artística.
Su formación humanística se enriquece con la formación práctica para el gobierno de una casa.
Durante estos años de pensión, Luisa continúa su formación cristiana. A los 17 años se introduce en la vida espiritual. Puesto que disponía de tiempo, lee: la “Guía de pecadores” del P. Granada; la “Imitación de Cristo” y la “Introducción a la vida devota” de Francisco de Sales; el “Breve Discurso” de Bérulle…