Son los métodos o procedimientos que previenen un embarazo en mujeres sexualmente activas, ya sean ellas o sus parejas quienes los usen. Pueden ser hormonales o no hormonales, transitorios o definitivos, basados en tecnología o en conductas.
Métodos hormonales
Métodos combinados que contienen estrógeno y progestágeno y que se pueden administrar como píldoras, inyecciones, anillo vaginal o parche transdérmico.
Métodos que contienen solo progestágeno y que se pueden administrar como píldoras, inyecciones, implantes, anillo vaginal o dispositivo intrauterino.
Anticoncepción hormonal de emergencia que puede consistir en píldoras de levonorgestrel solo o en píldoras combinadas (Método de Yuzpe).
Métodos no hormonales reversibles:
Dispositivos intrauterinos.
Anticonceptivos de barrera masculinos (condón) y femeninos (condón, diafragma; espermicidas).
Método de la amenorrea de lactancia.
Métodos de abstinencia periódica (moco cervical (Billings); calendario; temperatura basal; sintotérmico).
Métodos no hormonales permanentes:
Anticoncepción quirúrgica voluntaria (esterilización) femenina.
Anticoncepción quirúrgica voluntaria (esterilización) masculina.
La Organización Mundial de la Salud (OMS) con la colaboración de expertos(as) de otras organizaciones y agencias, revisa periódicamente la evidencia científica disponible sobre el efecto que los métodos anticonceptivos puedan tener sobre la salud de las personas que los usan. Basándose en esta evidencia se han formulado recomendaciones que se presentan en los Criterios Médicos de Elegibilidad para el Uso de Anticonceptivos y las Recomendaciones sobre Prácticas Seleccionadas para el Uso de Anticonceptivos.
La función de los anticonceptivos es prevenir el embarazo de diferentes maneras, dependiendo del tipo de anticonceptivo que elijas:
La cirugía de esterilización femenina o masculina evita que el semen llegue al óvulo al cortar o dañar los conductos que transportan el semen (en hombres) o los óvulos (en mujeres).
Los anticonceptivos reversibles o métodos "LARC" de acción prolongada (dispositivos intrauterinos, implantes hormonales) evitan que los ovarios liberen óvulos, que el semen llegue al óvulo, o la implantación del óvulo en el útero (matriz).
Los métodos hormonales de corta duración, tales como la píldora, la minipíldora, el parche, la inyección y el anillo intravaginal, evitan que tus ovarios liberen óvulos o evitan que el semen llegue al óvulo.
Los métodos de barrera, como los condones, los diafragmas, la esponja y el capuchón cervical, evitan que el semen llegue al óvulo.
Los métodos naturales del ritmo implican evitar tener sexo o usar otros métodos anticonceptivos en los días que eres más fértil (los días que es más probable que quedes embarazada).
Puedes comprar los siguientes tipos de anticonceptivos de venta libre en farmacias o supermercados:
Condones masculinos
Condones femeninos
Esponjas
Espermicidas
Píldoras anticonceptivas de emergencia (EC, por sus siglas en inglés). Plan B One-Step® y sus versiones genéricas se encuentran disponibles en farmacias y algunos supermercados para cualquier persona, sin receta. Sin embargo, no debes usar EC como tu método anticonceptivo regular porque no funciona tan bien como los métodos anticonceptivos regulares. Debes usar EC solo cuando tu método anticonceptivo regular no funciona por alguna razón inesperada.