Los arándanos, son bayas diminutas de color negro azulado y sabor ligeramente ácido, se revelan como un excelente apoyo para tu salud, por sus grandes cualidades antioxidantes y antiinflamatorias, entre otras.
En los países del centro y norte de Europa cosecha de estos gustosos frutos en el monte. si el año es bueno, dedican una mañana larga recojiendo los mejores reductos de esta mata silvestre, para luego pasarse unos días elaborando mermeladas, jaleas y confituras en casa, con las que llenar la despensa.
El proceso de deshidratación del arandano, consta básicamente de tres etapas:
1. Lavado de la fruta con soda caústica en proporciones determinadas, cuyo objetivo principal es el retiro de la cerosidad blanca que el arandano naturalmente posee para facilitar luego su horneado en nuestro horno deshidratador.
2. La temperatura de trabajo estará entre 60-65 ºC, durante 10 horas aproximadamente, tiempo suficiente para reducir la humedad del 85 % al 15 %.
3. Empaque en bolsas de polipropileno cristal, debiendo prestar atención sobre todo al cierre hermético de las mismas y su almacenamiento en lugares frescos (18 ºC) y secos ( 50%).
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Los arándanos contienen una amplia diversidad de micronutrientes, con niveles notables de minerales esenciales como el manganeso (100 g de arándanos procuran el 20% del que se precisa al día), la vitamina C (el 17%) y varias vitaminas del grupo B.
1. Reduce el riesgo de sufrir cáncer
2. Es antiinflamatorio
3. Rejuvenece4. Previene enfermedades neurodegenerativas
5. Previene el daño en el ADN
6. Ayuda a luchar contra la diabetes
7. Favorece la presencia de colesterol bueno
8. Reduce la presión arterial
9. Mejora las funciones cognitivas y la memoria
10. Mejora la vista
11. Ayuda a reducir grasa
12. Ayuda a tener mejores relaciones íntimas
13. Mejora la salud del cabello
14. Cuida la piel