Historia
Una de las primeras obras escritas pensando en los niños es Mundo visible en dibujos (1658), del humanista Comenio, que presentaba una novedad de enorme importancia para el futuro, pues acompañaba cada palabra de una figura. De alguna manera, puede considerarse el primer libro ilustrado para niños en la historia de la literatura infantil. A finales del siglo XVII y durante el XVIII se publicaron tres obras que, a pesar de que no fueron pensadas para los niños, se convirtieron, con el paso del tiempo, en grandes clásicos de la literatura infantil.
La primera, publicada en 1697, es Cuentos del pasado, subtitulada Cuentos de Mamá Oca, del escritor francés Charles Perrault, que recopiló cuentos populares franceses y también narraciones italianas. Al final de cada cuento añadió una moraleja. Con estos cuentos maravillosos, Perrault introdujo y consagró el mundo de las hadas en la literatura infantil. Algunos de esos cuentos son conocidos por casi todos los niños, como: La Cenicienta, Pulgarcito, El gato con botas, La bella durmiente, Caperucita Roja o Piel de asno, entre otros.