Durante el siglo XVIII, Nueva España producia la plata con la que se
movian los mercados del mundo. Una parte de la produccion minera era
enviada a España. La ciudad de Mexico era la mas grande de America con
unos 90 mil habitantes a finales del siglo XVI y 113 mil en el siglo XVIII. Funcionaba como centro politico y financiero del Virreinato.
La produccion de
plata vinculo a Nueva España con la economia mundial globalizada que
estaba en formacion desde el siglo XVI, pero tambien propicio la
creacion de un mercado interno que estuvo en pleno. El comercio local sigue siendo fundamental para la economia, de esta actividad depende la sobrevivencia de numerosos grupos sociales, especialmente del campo y zonas alejadas.
Las grandes familias criollas del siglo XVIII solian tener entre en sus miembros hombres y mujeres de la Iglesia, comerciantes, vinculos con ricos mineros y funcionarios del gobierno virreinal.