De media, un adulto suele leer algo más de 200 palabras por minuto
mientras que esa cifra aumenta hasta 325 palabras por minuto de media
para los estudiantes universitarios. Sin embargo, esa cantidad se queda
corta si la comparamos con profesores universitarios o altos ejecutivos.Como ves, la lectura es algo que se puede entrenar y mejorar. Esto puede ser clave para estudiantes que se encuentran bajo la presión de los exámenes y necesitan sacar el máximo partido a su tiempo.A continuación, te contamos 4 pequeños trucos que puedes utilizar para leer más palabras en menos tiempo.
“Pensamos que la concentración significa decir SÍ a la cosa en la que te
quieres concentrar. Pero eso no es lo que significa en absoluto. Concentrarse significa decir NO a otros cientos de buenas ideas
que están presentes. Tienes que elegir con cuidado. Estoy tan orgulloso
de las cosas que no hemos hecho, como de las cosas que hemos hecho.” Steve JobsPor tanto, concentración significa decir NO a consultar tu teléfono
móvil o las redes sociales, a mirar al horizonte, a leer las noticias,
etc. Concentración significa decir NO a la multi-tarea y centrarnos en una sola cosa, la lectura.
Aquí tienes algunos claves que te ayudarán a leer más rápidamente:
Céntrate en la velocidad primero: Tu nivel de comprensión mejorará con la práctica.
Usa una Guía (el dedo, un bolígrafo o incluso una hoja de papel) para evitar perderte.
Minimiza la Regresión.
Incrementa tu campo de visión.
Mueve tus ojos inteligentemente.
No leas en voz alta ni para ti mismo: Esto reduce tu capacidad de
lectura a unas 250 palabras por minuto. Recuerda: tu cerebro es más
rápido que tu lengua.
Diferentes tipos de lectura requieren diferentes niveles de comprensión:
no es lo mismo leer un libro de Harry Potter que un texto científico.
Por ello, antes de empezar a leer, analiza a qué tipo de texto te estás enfrentando y cuál es tu objetivo al leerlo.
Recuerda: La repetición es la base del aprendizaje.
La cuestión es cómo llevar a cabo esta repetición. Para ello existen varios métodos:
Tomar Apuntes una de las formas de repetición más comunes y efectivas.
Enseñar a otra persona. “Enseñar es aprender por segunda vez”
Los Mapas Mentales te ayudan a poner todo en perspectiva, además de crear nuevas conexiones e ideas.
Otras técnicas de memorización como las reglas mnemotécnicas o el palacio de memoria también te pueden resultar muy útiles.