No
sabemos qué dificultades haya tenido la humanidad para resguardarse de las
inclemencias del clima; seguramente vivió bajo los árboles, en cuevas e inicio
la construcción de viviendas, pero ¿qué buscaba: sólo cubrirse o tener
comodidades?, ¿cuántas observaciones habrán sido imprescindibles para acumular
la experiencia necesaria y así lograr su evolución?
Desde
luego, para construir una vivienda existen muchos factores, por ejemplo: el
clima (cálido, templado o extremadamente frío), el terreno (plano o sinuoso),
la tipología (distribución de los espacios, el número de habitaciones, baños,
etc.), los materiales (madera, piedra, ladrillo, hierro u hormigón armado) y
primordialmente los recursos económicos de los usuarios.