Los sucesores fueron elegidos de entre la familia de Mahoma. Durante este califato se declaró el idioma oficial para El Corán. Se extendieron hacia Siria, Palestina, Egipto y Mesopotamia.
Los Omeyas accedieron al poder y trasladaron la capital a Damasco. El Imperio se expandió a la Península Ibérica. Allí es donde fundó el reino de Al-Andaluz. Pero con ellos llegó la división religiosa del Islam.
En esta etapa hubo un cierto esplendor en el Imperio hasta el siglo Xl. A psrtir del año 1031 el reino se fragmentó en diferentes taifas, esto favoreció a la expansión de reinos cristianos.