El derecho de iniciar leyes o decretos compete: I. Al Presidente de la República; II. A los Diputados y
Senadores al Congreso de la Unión; III. A las Legislaturas de los Estados y de la Ciudad de México; y IV.
A los ciudadanos en un número equivalente, por lo menos, al cero punto trece por ciento de la lista
nominal de electores, en los términos que señalen las leyes. La Ley del Congreso determinará el
trámite que deba darse a las iniciativas. El día de la apertura de cada periodo ordinario de sesiones el
Presidente de la República podrá presentar hasta dos iniciativas para trámite preferente, o señalar
con tal carácter hasta dos que hubiere presentado en periodos anteriores, cuando estén pendientes
de dictamen
Cada iniciativa deberá ser discutida y votada por el Pleno de la Cámara de su origen en un plazo
máximo de treinta días naturales
Si no la iniciativa, en sus términos y sin mayor trámite, será el primer asunto que deberá ser
discutido y votado en la siguiente sesión del Pleno
En caso de ser aprobado o modificado por la Cámara de su origen, el respectivo proyecto de ley o
decreto pasará de inmediato a la Cámara revisora
la Cámara revisora, la cual deberá discutirlo y votarlo en el mismo plazo y bajo las condiciones antes
señaladas.
FORMACIÓN
Aprobado un proyecto en la Cámara de su origen, pasará para su discusión a la otra. Si ésta lo
aprobare, se remitirá al Ejecutivo
Ejecutivo, quien, si no tuviere observaciones que hacer, lo publicará inmediatamente
y PSS YA
Se reputará aprobado por el Poder Ejecutivo todo
proyecto no devuelto con observaciones a la Cámara de
su origen dentro de los treinta días naturales siguientes
a su recepción; vencido este plazo el Ejecutivo dispondrá
de diez días naturales para promulgar y publicar la ley o
decreto
Transcurrido este segundo plazo, la ley o decreto será considerado promulgado y el Presidente de la
Cámara de origen ordenará dentro de los diez días naturales siguientes su publicación en el Diario
Oficial de la Federación, sin que se requiera refrendo. Los plazos a que se refiere esta fracción no se
interrumpirán si el Congreso cierra o suspende sus sesiones, en cuyo caso la devolución deberá
hacerse a la Comisión Permanente.
El proyecto de ley o decreto desechado en todo o en parte por el Ejecutivo, será devuelto, con sus
observaciones, a la Cámara de su origen. Deberá ser discutido de nuevo por ésta,, (sic DOF 05-02-1917)
y si fuese confirmado por las dos terceras partes del número total de votos, pasará otra vez a la
Cámara revisora. Si por esta fuese sancionado por la misma mayoría, el proyecto será ley o decreto y
volverá al Ejecutivo para su promulgación.
El Ejecutivo de la Unión no puede hacer observaciones a las resoluciones del Congreso o de alguna de
las Cámaras, cuando ejerzan funciones de cuerpo electoral o de jurado, lo mismo que cuando la
Cámara de Diputados declare que debe acusarse a uno de los altos funcionarios de la Federación por
delitos oficiales.
Tampoco podrá hacerlas al Decreto de convocatoria a sesiones extraordinarias que expida la Comisión
Permanente.
Si algún proyecto de ley o decreto, fuese desechado en su totalidad por la Cámara de revisión, volverá
a la de su origen con las observaciones que aquella le hubiese hecho. Si examinado de nuevo fuese
aprobado por la mayoría absoluta de los miembros presentes, volverá a la Cámara que lo desechó, la
cual lo tomará otra vez en consideración, y si lo aprobare por la misma mayoría, pasará al Ejecutivo
para los efectos de la fracción A; pero si lo reprobase, no podrá volver a presentarse en el mismo
período de sesiones.
Si un proyecto de ley o decreto fuese desechado en parte, o modificado, o adicionado por la
Cámara revisora, la nueva discusión de la Cámara de su origen versará únicamente sobre lo
desechado o sobre las reformas o adiciones, sin poder alterarse en manera alguna los artículos
aprobados. Si las adiciones o reformas hechas por la Cámara revisora fuesen aprobadas por la
mayoría absoluta de los votos presentes en la Cámara de su origen, se pasará todo el proyecto al
Ejecutivo, para los efectos de la fracción A. Si las adiciones o reformas hechas por la Cámara
revisora fueren reprobadas por la mayoría de votos en la Cámara de su origen, volverán a aquella
para que tome en consideración las razones de ésta, y si por mayoría absoluta de votos presentes
se desecharen en esta segunda revisión dichas adiciones o reformas, el proyecto, en lo que haya
sido aprobado por ambas Cámaras, se pasará al Ejecutivo para los efectos de la fracción A. Si la
Cámara revisora insistiere, por la mayoría absolut
HAY CAMARA DE DIPUTADOS Y CAMARA DE SENADORES
Las iniciativas de leyes o decretos se discutirán preferentemente en la Cámara en que se presenten, a
menos que transcurra un mes desde que se pasen a la Comisión dictaminadora sin que ésta rinda
dictamen, pues en tal caso el mismo proyecto de ley o decreto puede presentarse y discutirse en la
otra Cámara.
ADICIONES O REFORMAS A LA CONSTITUCION TAMBIEN PUEDEN SER ETIQUETADOS POR PREFERENTE
La formación de las leyes o decretos puede comenzar
indistintamente en cualquiera de las dos Cámaras, con
excepción de los proyectos que versaren sobre empréstitos,
contribuciones o impuestos, o sobre reclutamiento de
tropas, todos los cuales deberán discutirse primero en la
Cámara de Diputados.