Estructura celular Daniel
Matias sanchez G-502 N-12
Características generales de las células La célula está envuelta en una membrana —llamada
membrana plasmática— que encierra una sustancia rica en agua llamada citoplasma, en la que, a
menudo, es posible diferenciar la presencia de orgánulos celulares –entre ellos el núcleo celular- y,
son frecuentes, otros envoltorios exteriores. En el interior de las células tienen lugar numerosas
reacciones químicas que les permiten crecer, producir energía y eliminar residuos. El conjunto de
estas reacciones se llama metabolismo (término que proviene de una palabra griega que significa
cambio). En los animales y en las plantas superiores presentan especializaciones y se diferencian en
tejidos, con tipos celulares de forma y función diferente: tejidos epidérmicos y epiteliales, muscular,
nervioso
Orgánulos del citoplasma
Mitocondria
Las mitocondrias son uno de los orgánulos más conspicuos del citoplasma y se encuentran en casi
todas las células eucarióticas. Observadas al microscopio, presentan una estructura característica: la
mitocondria tiene forma alargada u oval de varias micras de longitud y está envuelta por dos
membranas distintas, una externa y otra interna, muy replegada. Las mitocondrias son los orgánulos
productores de energía. La célula necesita energía para crecer y multiplicarse, y las mitocondrias
aportan casi toda esta energía realizando las últimas etapas de la descomposición de las moléculas
de los alimentos. Estas etapas finales consisten en el consumo de oxígeno y la producción de dióxido
de carbono, proceso llamado respiración, por su similitud con la respiración pulmonar. Sin
mitocondrias, los animales y hongos no serían capaces de utilizar oxígeno para extraer toda la
energía de los alimentos y mantener con ella el crecimiento y la capacidad de reproducirse. Los
organismos llamados anaerob
cloroplasto
Los cloroplastos son orgánulos aún mayores y se encuentran en las células de plantas y algas, pero no en
las de animales y hongos. Su estructura es aún más compleja que la mitocondrial: además de las dos
membranas de la envoltura, tienen numerosos sacos internos formados por membrana que encierran el
pigmento verde llamado clorofila. Desde el punto de vista de la vida terrestre, los cloroplastos
desempeñan una función aún más esencial que la de las mitocondrias: en ellos ocurre la fotosíntesis; esta
función consiste en utilizar la energía de la luz solar para activar la síntesis de moléculas de carbono
pequeñas y ricas en energía, y va acompañado de liberación de oxígeno. Los cloroplastos producen tanto
las moléculas nutritivas como el oxígeno que utilizan las mitocondrias.
Composición química
En los organismos vivos no hay nada que contradiga las leyes de la química y la física. La
química de los seres vivos, objeto de estudio de la bioquímica, está dominada por
compuestos de carbono y se caracteriza por reacciones acaecidas en solución acuosa y en
un intervalo de temperaturas pequeño. La química de los organismos vivientes es muy
compleja, más que la de cualquier otro sistema químico conocido. Está dominada y
coordinada por polímeros de gran tamaño, moléculas formadas por encadenamiento de
subunidades químicas; las propiedades únicas de estos compuestos permiten a células y
organismos crecer y reproducirse. Los tipos principales de macromoléculas son las
proteínas, formadas por cadenas lineales de aminoácidos; los ácidos nucleicos, ADN y ARN,
formados por bases nucleotídicas, y los polisacáridos, formados por subunidades de azúcar
Células procarióticas y eucarióticas
Entre las células procarióticas y eucarióticas hay diferencias
fundamentales en cuanto a tamaño y organización interna. Las
procarióticas, que comprenden bacterias y cianobacterias (antes llamadas
algas verdeazuladas), son células pequeñas, entre 1 y 5 µm de diámetro, y
de estructura sencilla; el material genético (ADN) está concentrado en una
región, pero no hay ninguna membrana que separe esta región del resto de
la célula. Las células eucarióticas, que forman todos los demás organismos
vivos, incluidos protozoos, plantas, hongos y animales, son mucho mayores
(entre 10 y 50 µm de longitud) y tienen el material genético envuelto por
una membrana que forma un órgano esférico conspicuo llamado núcleo.
De hecho, el término eucariótico deriva del griego ‘núcleo verdadero’,
mientras que procariótico significa ‘antes del núcleo
Superficie celular
El contenido de todas las células vivas está rodeado por una membrana delgada llamada membrana
plasmática, o celular, que marca el límite entre el contenido celular y el medio externo. La
membrana plasmática es una película continua formada por moléculas de lípidos y proteínas, entre
8 y 10 nanómetros (nm) de espesor y actúa como barrera selectiva reguladora de la composición
química de la célula. La mayor parte de los iones y moléculas solubles en agua son incapaces de
cruzar de forma espontánea esta barrera, y precisan de la concurrencia de proteínas portadoras
especiales o de canales proteicos. De este modo la célula mantiene concentraciones de iones y
moléculas pequeñas distintas de las imperantes en el medio externo. Otro mecanismo, que consiste
en la formación de pequeñas vesículas de membrana que se incorporan a la membrana plasmática o
se separan de ella, permite a las células animales transferir macromoléculas y partículas aún
mayores a través de la membrana. Casi
Citoplasma y citosol
La solución acuosa concentrada en la que están suspendidos los orgánulos se llama citosol. Es un
gel de base acuosa que contiene gran cantidad de moléculas grandes y pequeñas, y en la mayor
parte de las células es, con diferencia, el compartimiento más voluminoso (en las bacterias es el
único compartimiento intracelular). En el citosol se producen muchas de las funciones más
importantes de mantenimiento celular, como las primeras etapas de descomposición de moléculas
nutritivas y la síntesis de muchas de las grandes moléculas que constituyen la célula. Aunque
muchas moléculas del citosol se encuentran en estado de solución verdadera y se desplazan con
rapidez de un lugar a otro por difusión libre, otras están ordenadas de forma rigurosa. Estas
estructuras ordenadas confieren al citosol una organización interna que actúa como marco para la
fabricación y descomposición de grandes moléculas y canaliza muchas de las reacciones químicas
celulares a lo largo de vías restringidas.
El núcleo
El órgano más conspicuo en casi todas las células animales y vegetales es el núcleo; está rodeado de
forma característica por una membrana, es esférico y mide unas 5 µm de diámetro. Dentro del
núcleo, las moléculas de ADN y proteínas están organizadas en cromosomas que suelen aparecer
dispuestos en pares idénticos. Los cromosomas están muy retorcidos y enmarañados y es difícil
identificarlos por separado. Pero justo antes de que la célula se divida, se condensan y adquieren
grosor suficiente para ser detectables como estructuras independientes. El ADN del interior de cada
cromosoma es una molécula única muy larga y arrollada que contiene secuencias lineales de genes.
Éstos encierran a su vez instrucciones codificadas para la construcción de las moléculas de proteínas
y ARN necesarias para producir una copia funcional de la célula