Da respuesta a: "¿Hasta dónde puede llegar el conocimiento?" y a
"¿Qué puedo conocer?" en la crítica a la razón pura (teoría del
conocimiento). Y a "¿Qué debo hacer?" en la Crítica a la razón pura y
en Fundamentos de la metafísica de las costumbres (ética).
2. Teoría del conocimiento
(Crítica a la razón pura)
"¿Es posible la metafísica como ciencia?": para ello, debemos conocer
los juicios. JUICIO SINTÉTICO que amplía el conocimiento pero hay que
comprobarlos, JUICIO ANALÍTICO no se pueden comprobar y no
amplían el conocimiento. Por otro lado, los juicios también pueden ser:
A PRIORI si están en la mente, o A POSTERIORI si están en la realidad.
Las matemáticas trabajan con juicios sintéticos a priori y, la metafísica no.
Por ello, la metafísica es posible como ciencia. Para llegar a esta conclusión,
Kant armoniza el racionalismo de Descartes con el empirismo de Hume: "lo
puesto por la razón debe combinarse con lo dado por los sentidos". Kant
diferencia dos términos:
Fenómenos: objetos situados en un espacio
y en un tiempo sometidos a una categoría.
Noúmenos: objetos que no están
situados ni en un espacio ni en un
tiempo, ni sometidos a alguna categoría.
3. Ética (Crítica a la razón práctica y Fundamentos
de la metafísica de las costumbres)
"¿Cómo podemos conseguir que un principio práctico se eleve a una categoría de
ley?": para ello, Kant analiza las teorías éticas y encuentra tres elementos negativos.
Sus normas son EMPÍRICAS (a posteriori); sus preceptos son HIPOTÉTICOS o
CONDICIONALES; y sus principios son HETERÓNOMOS (no dictados por la razón).
El único criterio que permite determinar el
valor moral de una acción es la buena
voluntad, no el interés personal.
Tras analizar las éticas materiales, Kant observa que la ética formal se rige
por el "IMPERATIVO CATEGÓRICO", que nos dice cómo debemos actuar.
La demostración de la existencia de Dios se aborda en la Crítica de la razón pura, en la que Kant afirma
que es imposible demostrar su existencia; y en la Crítica a la razón práctica afirma que Dios, la libertad
y la inmortalidad del alma son noúmenos, es decir, impenetrables por el conocimiento científico.
4. Conclusión
Kant niega la posibilidad de la metafísica como ciencia en la "Crítica a la
razón pura", pero deja abierta la posibilidad de acceder en temas metafísicos
en forma de postulados de la moralidad en la "Crítica a la razón práctica".