Es un concepto que nos
habla de cosas cotidianas
que se conectan al Internet.
Desde hace unos 30
años que se viene
trabajando con la idea
de hacer más
interactivos todos los
objetos de uso cotidiano.
El Internet de las cosas potencia objetos que
antiguamente se conectaban mediante circuito cerrado,
como comunicadores, cámaras, sensores, y demás, y les
permite comunicarse globalmente mediante el uso de la
red de redes.
se trata de una red que
interconecta objetos físicos
valiéndose del Internet
Los objetos se valen de un
hardware especializado que
le permite la conectividad al
Internet
pero tambien
programan eventos
específicos en función de
las tareas que le sean
dictadas remotamente.
¿Cómo
funciona el
Internet de
las cosas?
Se trata de de chips y
circuitos que cuentan con
todas las herramientas
necesarias para cumplir
labores especializadas muy
especificas.
se les puede clasificar como objetos que
funcionan como sensores y objetos que
realizan acciones activas.
Cada uno de los objetos
conectados al Internet tiene
una IP especifica y mediante
esa IP puede ser accedido
pare recibir instrucciones.
Así mismo, puede contactar
con un servidor externo y
enviar los datos que recoja.
¿Cuándo estará entre nosotros?
A diferencia de algunas tecnologías mucho más populares entre las masas, el Internet de
las cosas no ha encontrado su foco de explosión en el mercado del consumo.
La industria de producción en
masa: la maquinaria que se
encarga de controlar los procesos
de fabricación, robots
ensambladores, sensores de
temperatura, control de
producción, todo está conectado al
Internet en cada vez más
empresas lo que permite
centralizar el control de la
infraestructura.
Control de infraestructura urbana: control de
semáforos, puentes, vías de tren, cámaras urbanas.
Control ambiental: una de las áreas en
las que está teniendo más éxito el
Internet de las cosas, pues permite
acceder desde prácticamente cualquier
parte a información de sensores
atmosféricos, meteorológicos, y
sísmicos.
Sector salud: cada vez más clínicas y hospitales
alrededor del mundo confían en sistemas que les
permiten al personal de salud monitorear activamente a
los pacientes de manera ambulatoria y no invasiva.
También hay aplicaciones del Internet de las Cosas para el transporte, la industria energética, y prácticamente todos
los sectores comerciales.