Es un conjunto de reglas o principios ordenadamente relacionados que concurren a un
mismo fin o constituyen un cierto modo de unidad.
Son
funciones básicas realizadas por el sistema: entradas, procesos y salidas.
Entradas: Ingresos del sistema, que pueden ser recursos materiales, humanos o
información.
Proceso: Transforma una entrada en salida. Puede ser una máquina, un individuo,
una computadora, un producto químico, una tarea realizada por un miembro de la
organización, etcétera.
Salidas: Son los resultados que se obtienen de procesar las entradas, y al igual
que éstas pueden adoptar la forma de productos, servicios e información.
Hay variedad de sistemas y una amplia gama de tipologías para clasificarlos, de
acuerdo con ciertas características básicas.
Cerrados: No presentan intercambio con el medio ambiente que los rodea; son
herméticos a cualquier influencia ambiental.
Físicos o concretos: Cuando están compuestos por equipos, maquinaria, objetos y
cosas reales.
Abstractos: Cuando están constituidos por conceptos, planes, hipótesis e ideas.
Abiertos: Presentan relaciones de intercambio de materia y energía con el
ambiente, a través de entradas y salidas. Son eminentemente adaptativos.