En el año 1000 comienza la antigua historia y finaliza en el 476 con la caída del imperio romano.
Podemos dividir los pueblos de la historia antigua en cultura íbera y cultura celta.
Tuvo más relevancia la cultura íbera.
Los tartessos fueron un pueblo celta que aportaron el Tesoro de Carambolo.
Arévacos fue un pueblo celtíbero.
A los íberos de les consideraba un pueblo muy arcaico y primitivo.
Los Fenicios trajeron la escritura a la peninsula.
Los griegos fueron los que desarrollaron la tecnología naval.
Emporion fue la única colonia que pudieron crear los griegos.
Los fenicios mantienen la construcción de casas circulares.
Los pueblos íberos tenían una cultura rica con gran comercio en contraste con los pueblos celtas.
La organización de los pueblos íberos era política estatal a modo griego.
La dama de Elche forma parte del mundo celta.
Se relaciona la cultura celta con los campos de urnas.
El origen de los celtas está en los pirineos y posteriormente se expandieron hasta Alemania.
Los pueblos celtas tenían un gobernante y pequeños cabecillas.
La cultura castreña se basa en la construcción de viviendas circulares por parte de los celtas.
La capital de los fenicios era Cartago.
La caída de Tiro lleva a Cartago a convertirse en la principal potencia mediterránea.
La Primera Guerra Púnica (264-241) se llevó a cabo en el mar entre los cartagenises y los romanos.
Roma perdió la primera guerra púnica y tuvo que pagar grandes indemnizaciones a Cartago.