Created by Paola Leticia Sosa Enriquez
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Análisis del libro de la Biblia, Eclesiastés
Propósito y Enseñanza
El autor de Eclesiastés usa sus poderes de sabiduría para trabajar y examinar la experiencia humana y de igual forma valorar sus situaciones. Su perspectiva está limitada a lo que ocurre “debajo del sol” (como lo es para todos los maestros sabios). Él considera la vida como la ha experimentado y observado entre los horizontes del nacimiento y la muerte – la vida dentro de las barreras de su mundo visible. Su sabiduría no puede penetrar más allá del último horizonte; él solo puede observar el fenómeno de la muerte y percibir los límites que asigna a los seres humanos. Dentro de los límites de la experiencia y observación humana, se preocupa por describir lo que es “bueno” que la gente haga. Y representa una sabiduría devota. La vida en el mundo está debajo de Dios – para todos sus enigmas. Por lo tanto, lo que comienza con “¡Vanidad de vanidades!” (1:2) termina con “Acuérdate de tu Creador” (12:1) y “Teme a Dios y guarda sus mandamientos” (12:13).
Eclesiastés cap. 2
El autor relata el trabajo que realizó por años, las cosas que pudo comprar, los siervos que pudo tener y lo cómo que estuvo al darse cuenta de todo lo que alcanzó a poseer. El choque impactante para él fue cuando en su corazón analizó y todo era vanidad.
Hace conciencia y manifiesta que también debemos trabajar sabiamente.
Eclesiastés cap. 4
El trabajo y lo que realicemos debe de darnos paz. Se disfruta de lo que no tiene cuando nos esforzamos por ello, y así, esto también debe caracterizarse de límites. Es importante no tener vanidad en nuestra alma, para no contaminar el resto de nuestro ser.
Eclesiatés cap. 6
Es común encontrar personas llenas de cosas materiales y no sentirse satisfechas con ellas. Esto también es vanidad.
Todo lo que tenemos por Dios nos fue dado, debemos encontrar un equilibrio disfrutando lo que tenemos, buscando estar bien y no sobrellevar lo que podemos poseer.
Eclesiastés cap. 8
Para llevar una vida tranquila y en paz con nosotros mismos, es importante basarnos en los mandamientos de Dios dados a la humanidad, y solo nuestro mismo creador sabe qué es lo mejor para nosotros.
Eclesiastés cap. 10
Describe las características de las personas necias, que aún, viendo manifiesto todos sus errores no son capaces de cambiar, ni mejorar, ni hacer nada para enderezar su vida.
Eclesiastés cap. 12
Por todo lo que tenemos hay que darle gracias a Dios, aprovechemos el tiempo, generemos buenos frutos agradables al señor y que nuestra vida misma de honra al padre.