San Pedro, fue un apóstol singular, ya que este fue nombrado por Jesús de Nazaret, su representante en la tierra después de la resurrección. Según Jesús el debía impartir el evangelio del señor en la tierra creando la llamada iglesia primitiva.
(272- 337), conocido como Constantino I o Constantino el Grande, fue emperador del Imperio Romano desde el año 306 al 337. Ha pasado a la historia como el primer emperador cristiano.
Constantino derrotó a Licinio y se convirtió en el único Augusto del imperio. Constantino llevó a cabo numerosas reformas de tipo administrativo, militar y económico, pero donde más destacó fue en las disposiciones político religiosas, y en primer lugar las que iban encaminadas a la cristianización del imperio. Promovió estructuras adecuadas para conservar la unidad de la Iglesia, como modo de preservar la unidad del estado y legitimar su configuración monárquica, sin que haya que excluir otras motivaciones religiosas de tipo personal. Junto a disposiciones administrativas eclesiásticas, tomó medidas contra herejías y cismas. Para defender la unidad de la Iglesia luchó contra el cisma causado por los donatistas en el norte de África y convocó el Concilio de Nicea para resolver la controversia trinitaria originada por Arrio. El 330 cambió la capital del imperio de Roma a Bizancio, que llamó Constantinopla, lo que supuso una ruptura con la tradición, a pesar de querer enfatizar el aspecto de capital cristiana. Como entonces ocurría a menudo, no fue bautizado hasta poco antes de morir.
(339-397) El Arsobispo de Milan fue un obispo de gran influencia en la política del imperio romano.
(346, 395) Teodosio I, de orígenes hispanos fue el último emperador que gobernó todo el Imperio unido, pertenecía a una familia rica de la aristocracia, era un noble militar.