En general las personas tienen 3 motivos principales por lo que demoran en iniciar sus proyectos, particularmente los que refieren a las finanzas. Estos motivos son:

Falta de métodos: No saber qué hacer y/o cómo hacerlo.
Tendencia a procrastinar: Siempre; ya sea por falta de métodos, falta de iniciativa, etc., postergamos el inicio de nuestros proyectos financieros como generales. Esto hace que vivamos el mes a mes, que no podamos ahorrar, mucho menos invertir, no controlar los gastos, etc. El nivel de ingresos no es una excusa tampoco ya que lo importante es la capacidad de ahorro que tengamos.
Factores imprevistos: Son cuestiones de la vida de las que no tenemos control ya sea accidentes, urgencias, etc.

Nosotros podemos accionar sobre el punto 1 y 2. En lo que respecta a la falta de métodos es una cuestión de tener voluntad, curiosidad y ganas de capacitarse constantemente. En cambio, en relación con la tendencia a procrastinar, debemos tener en claro que las cosas no pasarán solas si no ayudamos a que pasen.

Por otra parte, los factores imprevistos no los podemos evitar, pero podemos prepararnos y planificar una red de seguridad para amortiguar el impacto que va a tener en nuestra estructura financiera.

Conceptualmente, a lo largo de nuestra vida económica-financiera, todos tendremos el siguiente comportamiento respecto nuestros ingresos:

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Apunte realizado por Emanuel Cassab del curso en asunto.

Finanzas para no financieros - Curso UBA