Las acciones individuales dentro de los modelos culturales le dan a la mujer distintos niveles de participación en las instituciones de nuestra sociedad.
La mujer en ningún país puede trabajar.
La mujer no puede estudiar ya que su genero se lo prohíbe.
La sociedad actual (afortunadamente son los menos) no confía en las habilidades de la mujer como empresaria.
Una mujer que ha conseguido el equilibrio entre sus ansias maternales y su realización como individuo establecerá una relación más beneficiosa con sus afectos.