Se pierde menos tiempo haciendo lo correcto que esperando a que todos se pongan de acuerdo.
Trabajo fácilmente con personas con puntos de vista diferentes al mío.
Me muestro tolerante y comprensivo si alguien comete algún error.
Es importante para mí motivar a mis compañeros.
Respeto siempre los puntos de vista ajenos aun cuando no los comparta.