Un bebé o un niño pequeño puede ahogarse deprisa y en menos de:
10 cm de agua.
La cantidad de agua suficiente para cubrirle la cabeza.
2.5 cm de agua.
En la piscina, si el niño/a tiene manguitos o flotadores no tiene riesgo de ahogarse.
Los niños nunca se dejan solos donde hay piscina, ni siquiera si se trata de una piscina infantil.
Para reducir el riesgo de ahogamiento se recomienda:
Colocar una valla alrededor de la piscina.
Retirar todos los juguetes de la piscina una vez el niño deje de estar en el agua para evitar que quiera recuperarlos.
Al utilizar piscinas inflables, hay que vaciarlas completamente de agua en cuanto dejen de utilizarse.
Ninguna es correcta.
Todas son correctas.
Las técnicas de reanimación cardiopulmonar están reservadas exclusivamente para personal médico y paramédico.