En sí la esencia del paso no está tanto en los pies, sino en cómo el cuerpo se mueve, especialmente las caderas.
El paso de cumbia es característico y recibe la danza el nombre por el paso, se ejecuta a dos tiempos:
El derecho avanza plano deslizado por el piso.
El izquierdo, apoyado en el metatarso adelanta un poco hasta colocarse al lado del derecho.
Así sucesivamente se va avanzando, se puede hacer también en el lugar, marcando a los lados, girando, etcétera.
Según unos profesores colombianos, la mujer marca los dos pasos a pie plano y con mucho movimiento de cadera, pero con el torso erguido, mientras el hombre marca el izquierdo en la forma ya descrita y se mueve más libremente, exagerando y agradando los movimientos de torso, hombros, flexiones, etcétera. Según ellos, la mujer representa a la raza india y el hombre a la raza negra.