Es una condición médica que implica la pérdida de movimiento voluntario en los músculos de un lado de la cara. Esto puede ocurrir debido a diversos factores, como daño o disfunción del nervio facial que controla los músculos faciales.
Repentina debilidad o paralisis de un lado de la cara.
caida de un lado de la cara y dificultad para hacer expresiones faciales.
Dificultad apara cerrar un ojo, sonreír, elevar la ceja, cerrar parpado.
Producción excesiva o escasa de lágrimas y saliva.
Dolor de cabeza.
Pérdida del sentido del gusto.
Es mas frecuentes en personas que presentan:
Infección de vías respiratorias, como gripe o resfriado.
Diabetes.
Presión arterias alta.
Obesidad.
Embarazo, durante el 3er trimestre, o primera semana después del parto.
PERIFERICA.
Ocurre debido a una lesión en el nervio facial después de que sale del tronco del encéfalo. La causa más común es la parálisis de Bell.
CARACTERISTICAS:
Afectación completa de un lado de la cara, Involucra todos los músculos de un lado de la cara, desde la frente hasta el mentón.
Incapacidad para cerrar el ojo en el lado afectado.
Debilidad en la frente y la boca.
Desviación de la comisura labial hacia el lado no afectado.
Pérdida del gusto.
CENTRAL
Se debe a una lesión en el tracto corticoespinal que afecta la conexión del cerebro con el nervio facial, generalmente antes de que este se bifurque hacia los músculos de la cara.
CARACTERISTICAS:
Afectación parcial de un lado de la cara: Solo afecta la parte inferior de la cara en el lado opuesto a la lesión.
Conservación de la movilidad en la frente y los ojos.
Desviación de la comisura labial.
Hay múltiples causas que provocan una alteración en el nervio facial, aunque no es clara la razón a manudo la relacionan con una infección viral, los cuales pieden ser:
Herpes labia y genital (herpes simple).
Varicela.
Mononucleosis infecciosa.
Enfermedades respiratorias.
Rubéola.
Paperas.
Influenza B.
Restaurar la función muscular: Mejorar el movimiento y la fuerza de los músculos faciales.
Prevenir la contractura muscular: Evitar que los músculos se vuelvan rígidos o se acorten.
Mejorar la simetría facial: Lograr un aspecto más equilibrado y funcional.