Creado por Dulce María Castillo Flores
hace más de 7 años
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A. DefinicionesDoctrina Naval: es el conjunto de principios, normas y procedimientos que guían la actuación del personal naval para el cumplimiento de las funciones asignadas. La doctrina tiene un cuerpo perfectamente definido y tangible constituido por las ideas, los procedimientos y las normas contenidos respectivamente en los planes, los manuales y los reglamentos.Las condiciones básicas de una doctrina son que esta debe ser conocida, aceptada y practicada. Esta se encuentra en los conceptos de patriotismo, honor, lealtad, deber, compañerismo, espíritu de cuerpo, también la encontramos en el ceremonial militar, en el acto o ceremonia de Protesta de Bandera, en la conmemoración de las fechas más importantes, en las honras fúnebres, en los guiones, la bandera, la veneración a los héroes, etc. Constituyendo así el elemento de cópula entre la disciplina y la moral; es en esencia la doctrina, el estímulo más importante que necesitamos para mantener la llama ardiente de nuestra formación naval. Doctrina entonces en su significado más amplio significa enseñanza. Disciplina: por su parte es sinónimo de orden y aprendizaje, y a pesar de que su uso es más comúnmente empleado en el medio militar, no es privativo de éste. La disciplina se puede imponer o se puede inculcar; un hombre puede ser indisciplinado siendo militar o puede ser disciplinado sin ser impuesta a través de los medios que otorgan los códigos, las leyes y los reglamentos, pero también debe ser inculcada mediante el ejemplo; si solamente se aplica al primer concepto, solo se obtendrá la subordinación pero mediante los dos, se obtienen la subordinación y el respeto. B. Normas de conducta comunes a todos los Marinos Militares 1. Los Marinos Militares deben esmerarse en aplicar los conocimientos básicos que les inculquen. 2. El servicio naval exige que todo individuo acepte con entereza y dignidad los rigores de la disciplina. 3. Para asimilar adecuadamente los conocimientos navales que se les imparten en las aulas, en las sesiones de instrucción y entrenamiento, es obligatorio poner todo el empeño y dedicación. 4. Deben sentirse honrados y orgullosos de poner siempre muy en alto el nombre de la Institución y de su unidad, actuando con gallardía en todas las actividades en que participen. 5. Procurarán mantenerse constantemente enterados y poner en práctica las normas de conducta especificadas; tanto en las leyes y reglamentos, como en las buenas costumbres establecidas por la sociedad. 6. Se esmerarán por hacerse merecedores de los conceptos de honor, moral, coraje, integridad, honradez, conducta y desempeño profesional. 7. Mostrarán en todos sus actos, dentro y fuera del servicio conducta militar, apariencia y cortesía ejemplares. 8. Llevarán a la práctica los elevados conceptos del espíritu de cuerpo y lealtad al país, a la Secretaría de Marina y a su unidad. 9. Demostrarán: Porte, energía y gallardía en todas las actividades en que participen. Manteniéndose constantemente en buena condición física. 10. No aceptarán, por ningún motivo y bajo ninguna circunstancia, acto alguno que los exponga a crueldades, indignidad, humillación, depresión o privación de sus derechos. 11. El reto, el desafío y las riñas personales son prácticas nocivas que no son admitidas en el sistema disciplinario naval. 12. Cuando transiten con un superior; le cederán el lado derecho; en los camiones el lado de la ventanilla, en los vehículos el asiento trasero del lado derecho; en la banqueta el lado de la pared; al entrar o salir de un local, le darán preferencia y por cortesía le abrirán la puerta; serán los primeros en abordar los vehículos militares y se sentarán en los asientos de atrás. En las embarcaciones menores serán los primeros en embarcar y se dirigirán hacia popa, en forma inversa serán últimos en desembarcar. 13. Cuando un superior entre a un recinto y no se encuentre otro de mayor jerarquía, el primero que se percate del arribo dará la voz de atención, a lo que el personal adoptará la posición de firmes permaneciendo en esa posición hasta que el superior se retire o bien ordene continuar. 14. Cada vez que un superior jerárquico los llame acudirán al paso veloz, harán alto a tres pasos de él, lo saludaran militarmente, permanecerán firmes, dirán su grado y nombre; a las preguntas que se le formulen les darán respuesta expedita, agregando al final la palabra “mi” y a continuación el grado jerárquico de la persona que lo ostente. Para demostrar que entendió lo que se le pregunta o comunica expresara enterado “mi” y a continuación el grado jerárquico de la persona que lo ostente. Una vez terminada la entrevista si el superior lo autoriza a retirarse dirá con su permiso “mi” y a continuación el grado jerárquico de la persona que lo ostente; si el superior no lo ha autorizado a retirarse y necesitan hacerlo para cumplir con alguna actividad u obligación, solicitará respetuosamente permiso para retirarse. 15. Al paso de un superior jerárquico, si se encuentran sentados, se pararan firmes y harán el saludo militar. 16. En caso de estar ocupados los lugares, le cederán el asiento a sus superiores. 17. Cuando se encuentren a su paso a un superior lo saludarán militarmente al mismo tiempo que le dirigirán la vista agregarán a su saludo militar el de buenos días, tardes, noches “mi” capitán, etc. Según corresponda. 18. Cuando tengan que rebasar a sus pasos superiores; saludarán militarmente y dirán con su permiso, mi teniente, etc. Por ningún motivo se meterán entre las personas. Si se encuentran corriendo, detendrán su paso, caminarán y al rebasarlos, expresarán el saludo como se indicó; una vez que los hayan rebasado podrán seguir corriendo. 19. El personal de la milicia auxiliar, clases y marinería no pueden tener en su poder armas de fuego a excepción del armamento a su cargo y únicamente durante los actos del servicio. 20. En el comedor, a las horas de los alimentos, deberán de sentarse erguidos, y deberán mostrar buenos modales y educación en la mesa. 21. Verificarán y/o cooperarán con el mantenimiento del orden y limpieza de las instalaciones navales. 22. Deberán siempre permanecer perfectamente aseados en su persona y vestuario, y no mezclarán las prendas correspondientes a diferentes uniformes, ni la ropa de civil con el uniforme; usarán ropa de civil cuando se autorice (franquicia, comisiones, vacaciones, etc.). La ropa de civil que usarán deberá ser preferentemente casual/formal. El personal femenino al vestir de civil lo harán con el cabello bien peinado y utilizando maquillaje ligero. También podrán usar conjuntos o vestidos, sin escotes exagerados, con aberturas ligeras, faldas a la altura de la rodilla, y sin transparencias. 23. Caminarán con la cabeza erguida haciendo un braceo natural y sin llevar las manos en los bolsillos. 24. Procurarán adaptarse a la vida militar en todos los aspectos; dentro y fuera de las unidades, todos sus actos deberán revelar disciplina, patriotismo, educación, cultura, caballerosidad y estimación por sus compañeros y superiores. Recuerde que las mujeres, los niños y los débiles serán siempre objeto de respeto, defensa y amparo. 25. En la calle no saludarán militarmente a los Agentes de Policía, Transito, de Migración, etc., pero si ellos saludan, contestarán el saludo como señal de buena educación. Por lo tanto, es su obligación que uno de los primeros cuidados serán aprender las insignias y divisas, tanto de la Armada, como del Ejército, Fuerza Aérea y las Instituciones arriba mencionadas. 26. En la vía pública, todos los Marinos Militares se saludarán entre si observando por principio la jerarquía y posteriormente a todos los que ostenten el mismo grado, pues con ello se pone de manifiesto la bien cimentada educación y ejemplar disciplina que distingue a la Secretaria de Marina. (En las áreas de alta peligrosidad, se aplicará lo establecido por su Mando Naval). 27. Al conversar principalmente con personas civiles, procurarán prestigiar siempre a la Armada, a sus superiores y compañeros; por ningún motivo manifestaran desagrado en obedecer órdenes ni censurarlas. (En las áreas de alta peligrosidad, se aplicará lo establecido por su Mando Naval). 28. Aún en la intimidad de su hogar observará las reglas establecidas por la urbanidad y no tratar de justificar las faltas que cometan en la Institución alterando la verdad. Recordarán que la discreción en asuntos del servicio, debe ser siempre una de sus virtudes fundamentales y tener presente que el descredito al pasar de boca en boca, puede redundar en daño moral o material para su unidad y para la Armada a las que debe honrarse en pertenecer. 29. La sana y elemental educación indica que no deben discutir sobre asuntos de religión, políticos o familiares, todos ellos deberán evitarlos y procurar que sus compañeros también los eviten. 30. Leer o comer en la calle, llevar bultos voluminosos, masticar chicle, silbar, hablar en voz alta que llame la atención etc., son acciones censurables para un militar y rebajan la dignidad del uniforme que porte. 31. Esta estrictamente prohibido entrar uniformado a cantinas, billares o centros de prostitución, lugares de juegos, reuniones políticas y en general a ningún lugar no acorde con el decoro de su uniforme. 32. Consumir cualquier tipo de droga ilegal, introducirla a su unidad o tenerla en su poder, porque pueden tipificarse como presuntos delitos en el caso de la posesión e introducirlas en su unidad. 33. Esta estrictamente prohibido ingerir bebidas embriagantes sin autorización dentro de la unidad. 34. Dentro de igual clasificación, se encuentra la evasión de su unidad, el abusar de las franquicias o permisos y la insubordinación o desobediencia hacia sus superiores. El incurrir en algunas de ellas, pone en peligro su estancia en la Institución y su libertad en caso de delitos. 35. Evitará toda clase de riñas con cualquier persona, comportándose con la mayor prudencia y tolerancia del caso, mientras ello sea compatible con su dignidad de militar. 36. Para saludar no se deben descubrir, sino que simplemente harán el saludo militar; pero si están descubiertos saludaran con una ligera inclinación de cabeza conservando una actitud militar. 37. Si se encuentran en el interior de un local y llegare un superior, se pondrán de pie inmediatamente y lo saludaran, sentándose después que él lo haya hecho, o les autorice para ello; excepto en el caso de que estén acompañando a un superior o de igual rango que aquel, limitándose exclusivamente a saludarlo sin ponerse de pie. 38. Si han de retirarse estando cerca el superior, saludaran al pasar frente a él, y si es él quien se retira al pasar frente a ustedes, se podrán de pie y lo saludaran. 39. En todas partes y ocasiones, observaran la mayor urbanidad y cortesía con las damas y en general con las personas que por su edad o su estado, merezcan toda clase de atenciones, cediéndoles la acera y el lugar preferente en vehículos u otros sitios; y será el primero en respetar los reglamentos, sean de tránsito, policía, etc., poniendo aún más esmero en ello en los países extranjeros que visite. 40. Al paso de la Bandera Nacional o de otra extranjera o cuando estén tocando el Himno Nacional o alguno extranjero, darán el frente hacia donde pase aquella, o se estén efectuando los honores; si están cubiertos, saludaran militarmente, pero si están descubiertos adoptaran la posición de firmes, seis pasos antes de llegar hasta seis pasos después de rebasarle la bandera o hasta que hayan concluido los honores; si están vestidos de civil, se descubrirán y tomando el sombrero por la copa con la mano derecha, cruzaran ese mismo brazo sobre el pecho, colocando el sombrero con la boca hacia su cuerpo, a la altura del corazón. 41. Si en alguna Ciudad donde se encuentren se altera el orden público, se presentaran al Comandante Naval o Militar de la Plaza para colaborar con él en la medida de sus posibilidades. 42. Jamás contraerán compromisos que no puedan cumplir, su palabra debe ser sagrada y cuando la empeñen, deben cumplir lo ofrecido. 43. El honor de las familias que les brindan su amistad es intocable; no harán nada ni de palabra ni de hecho que pueda afectarlos. 44. Deben evitar toda clase de juegos de azar, sobre todo en público, ya que no van de acuerdo con la seriedad de su indumentaria militar. 45. Evitarán en lo absoluto el uso de anillos y esclavas durante los entrenamientos y actos del servicio. 46. Al ir caminado sobre la acera de una calle e ir acompañado de una dama, se le ofrecerá el brazo izquierdo o derecho, de forma tal, que ella siempre quede del lado de la pared, y en caso de encontrarse con un superior, hará el saludo militar si tiene el brazo derecho libre, además de decir buenos días, buenas tardes o buenas noches, según corresponda. Si conduce a la dama con el brazo derecho, saludara de acuerdo a la hora del día e inclinará ligeramente la cabeza como muestra de respeto. 47. Tendrá siempre presente que en todos los casos imprevistos, se espera de usted que actúe con buen juicio, serenidad, cordura, sentido común educación y tacto; teniendo constantemente como objetivo principal el de ganar a través de sus acciones, mayor prestigio para su Institución. 48. Para que el Marino Militar se familiarice a la mayor brevedad posible con la vida interna de la Institución, deberá esmerarse en dar cumplimiento a las órdenes, consejos, asesoraría y entrenamiento que reciba por parte de sus superiores jerárquicos, quienes como instructores ya han experimentado estas situaciones. 49. Siempre le cederán el derecho de paso en los pasillos y escalas a los Marinos Militares con mayor jerarquía. 50. En todos los actos del servicio donde se encuentre personal naval, se harán las muestras de respeto y atenciones al de mayor cargo, grado o antigüedad, según corresponda. 51. A la hora que se indique para cualquier formación o comisión, deberá ser puntual procurando estar 10 minutos antes. 52. Es una regla de cortesía pasar en la mesa los alimentos a sus compañeros, le darán preferencia a los Marinos Militares con mayor jerarquía. No aceptaran que otros Marinos Militares dispongan de sus propios alimentos, cada Marino Militar recibe la misma ración alimenticia diaria. 53. Corresponden a todos los Marinos Militares sin distinción "los mismos derechos y las mismas obligaciones"; respetando y considerando las diferencias propias que por naturaleza atañen a cada género. 54. Dentro de las Instalaciones o unidades navales, está terminantemente prohibido que dos Marinos Militares de sexo opuesto estén solos de manera premeditada para realizar cualquier actividad en lugares apartados, ya sea efectuando demostraciones afectivas y de afabilidad, como intercambiar abrazos o tocar a otro compañero, así como cualquier tipo de fraternización o trato familiar, incluyendo bromas, miradas, guiños, sonrisas, salutaciones o conversaciones que vayan más allá de asuntos relacionados al servicio. 55. Cuando exista una actividad o situación que implique el apoyo o ayuda inmediata y requiera del contacto físico entre personal de ambos géneros, esta será proporcionada con las muestras de respeto correspondientes. 56. El trato verbal entre Marinos militares deberá ser de acuerdo a los buenos usos y costumbres navales, con la plena observancia de las leyes y reglamentos que rigen a la honorable Institución y de las directivas del Alto Mando. 57. Los Marinos Militares tienen prohibido pedir apoyo para beneficiarse u obtener privilegios personales, ni sobreprotección en todas y cada una de sus actividades, por parte de los superiores, iguales y subordinados, y más aún tratar de utilizar actitudes manipuladoras para lograr dicho cometido. 58. No permitirá conductas que afecten el derecho de ejercer la autoridad, ni situaciones que generen actos de resistencia al ejercicio del mando o intentos de desobediencia, descalificaciones, generalizaciones o ridiculizaciones por parte de cualquier género. 59. El Marino Militar debe procurar entablar amistad con personas civiles honradas y de buenas costumbres, debiendo estar consciente de la responsabilidad que implica sostener una relación íntima con personal civil de dudosa reputación, ya que la inseguridad actual del país pone en riesgo su integridad física y familiar, al momento de compartir información.60. El personal femenino, mientras se encuentren en las Instalaciones y unidades podrán maquillarse de forma discreta, y empleando colores que no sean llamativos. Usarán las uñas de un largo moderado y de colores discretos. Únicamente podrán portar aretes de tamaño no mayor al lóbulo de la oreja, los cuales deberán ser discretos, evitando aquellas cuyas formas o figuras no tengan un aspecto de seriedad. 60. El personal femenino, mientras se encuentren en las Instalaciones y unidades podrán maquillarse de forma discreta, y empleando colores que no sean llamativos. Usarán las uñas de un largo moderado y de colores discretos. Únicamente podrán portar aretes de tamaño no mayor al lóbulo de la oreja, los cuales deberán ser discretos, evitando aquellas cuyas formas o figuras no tengan un aspecto de seriedad. 61. Los Marinos Militares evitarán llamar la atención en la vía pública hablando en voz alta, gritando, profiriendo palabras obscenas o insolencias, o efectuando actos que provoquen desprestigio a su persona o a la Armada. 62. Los uniformes del personal naval no deberán de ser modificados o ajustados de manera exagerada y que impida el uso para el que fueron confeccionados, debiendo usar la ropa interior en el color y formas especificadas en la normatividad. 63. El personal naval no podrá vender o comprar lo perteneciente a la Nación y que se encuentra bajo su cuidado o cargo. Tal como uniformes, municiones, equipo, armamento, mobiliario, etc. 64. Durante la revisión médica, deberá de estar presente una persona del mismo sexo del paciente, preferentemente del servicio de sanidad naval. 65. En instrucción militar los Marinos militares de ambos géneros se integrarán por estatura, sin más distinción que aquellas obligadas por la jerarquía.
La base de todas las relaciones humanas, es el respeto mutuo, cualidad que debe cultivar el Marino Militar, para fundamentar el compañerismo entre él y sus compañeros. Considerando la inexperiencia y la inadaptabilidad momentánea a la vida militar de algunos Marinos, el personal de mayor jerarquía en uso de sus conocimientos y experiencias, guiarán a sus compañeros con menos experiencia con el ejemplo de su presentación y disciplina para hacerse acreedor a la estimación y respeto de quienes lo rodean. El personal naval debe tomar en cuenta que el abusar de su antigüedad, de su jerarquía y de su fuerza física, es contrario al honor y al respeto que debe caracterizar al Marino Militar, como modelo de caballerosidad, cualidad sustantiva en la carrera de las armas. A. En establecimientos navales 1. En el aula Considerando que siempre el marino estará preparándose constantemente tendrá presente lo siguiente: fungiendo como Jefe de grupo, estará el Marino Militar más antiguo, o aquel cuyos méritos lo distingan. Las órdenes dadas por éste, deben ser obedecidas, aun siendo de igual jerarquía que los demás, ya que la superioridad de cargos y responsabilidad de la disciplina de grupo le da autoridad para ello. Su correcta posición en el sentado, pondrá de manifiesto el respeto y consideración al profesor, así como el interés y atención por la clase. La permanencia en el salón estará regida por los toques de rutina correspondientes a la entrada y salida de clases, pudiendo permanecer fuera del salón de clases solamente durante los descansos, y está estrictamente prohibido hacerlo durante las horas de clase, sin la correspondiente autorización. Demostración de respeto al instructor y a cualquier superior que entre al salón, será el adoptar la posición de firmes debiendo permanecer en dicha posición hasta que se ordene sentarse. Es obligación de los Marinos Militares, formar por grupos a la entrada y salida de clases, debiendo el Jefe de cada grupo dar parte de las novedades a quien corresponda. La buena presentación y limpieza del salón de clases son testimonio de la calidad personal de los miembros del grupo. 2. En el dormitorio El aseo personal es sinónimo de pulcritud, cualidad que debe distinguir al Marino Militar; por ello, lo primero es el baño diario, al que deberá concurrir provisto de los útiles de aseo necesarios. El decoro y el pudor, inherentes a la buena educación, obligan al Marino Militar a no transitar fuera de los dormitorios en paños menores o desnudo; únicamente podrán estar desnudos en el cubículo de la regadera y en el momento de cambiarse de ropa en su taquilla. Para circular por el interior del dormitorio lo harán debidamente uniformados o de deportes. No debe fumar en su interior, ni escandalizar, debiendo mantener el perfecto aseo de su dormitorio, no manchando los pisos ni arrojando basura en los mismos. Debe tener un lugar determinado en sus toalleros, percheros y taquillas para colgar sus prendas; deberá igualmente cumplir las disposiciones relativas a la colocación de todas sus prendas. El personal naval no adornará sus taquillas con imágenes o fotografías de hombres o mujeres con mensajes eróticos, religiosos, pornográficos, políticos, etc., que dañen el buen prestigio del Marino Militar, estando permitido únicamente tener a la vista fotografías de sus familiares y conocidos (as) del medio civil. Para dormir, vestirán ropa de deportes o pants de la unidad o establecimiento. No está permitido el uso de pijamas, o que duerman desnudos o en ropa interior; e invariablemente dormirán en la litera que tengan asignada. Está prohibido al personal de ambos géneros, que se introduzcan a los dormitorios que no les correspondan sin la autorización correspondiente. No está permitido que el personal naval de ambos géneros circulen por los edificios de dormitorios del genero opuesto en horas no autorizadas. 3. En el comedor Reflejo de cabal educación, será su comportamiento en el comedor. Por principio, entrarán siempre en perfectas condiciones de aseo, formado con su unidad; no pueden entrar ni individualmente ni fuera de las horas reglamentarias. Al tomar asiento, lo harán evitando hacer ruido con la silla. Está estrictamente prohibido cometer los siguientes actos, que además son contrarios a la urbanidad: Fumar y leer. Levantarse del asiento sin el permiso correspondiente. Escupir. Lanzar bolitas de migajón. Cambiar alimentos por los de un cubierto desocupado o tomar estos. Golpear con los cubiertos el plato o la mesa. Soplar los alimentos para enfriarlos Apoyar los codos en la mesa o bajar las manos donde no se vean. Arrojar al piso cascaras, líquidos o residuos alimenticios. Reír ruidosamente, lanzar gritos o cantar. Sacar del comedor fruta, dulce, pan o cualquier otro alimento. Estar en el asiento mal sentado o semitendido. Extender el brazo frente a un compañero para tomar el salero, sopera, etc., (deben solicitarlo o esperar su turno). Masticar con la boca abierta, o haciendo ruido. Sorber alimentos líquidos. Tomar bocados demasiados grandes o hablar teniendo alimentos en la boca. Llevar el cuchillo a la boca. Bostezar Enjuagarse la boca al tomar agua (el aseo bucal deberán hacerlo en el lavabo del dormitorio, al terminar de comer). Usar el mantel para limpiarse la boca o manos (en caso de faltar servilletas, use su pañuelo). Hacer uso de palillos de dientes durante y después de la comida para sacarse residuos de comida de los dientes. Poner los cubiertos sucios sobre el mantel. Rascarse la cabeza u otra parte del cuerpo. Estornudar, toser o eructar sin cubrirse la boca. Tratar al servicio de camareros con altanería o usar familiaridades con ella (en caso de queja deben dar parte por los conductos debidos al oficial responsable de este servicio). Evite incurrir en cualquiera de estas faltas a la urbanidad, donde la sanción más evidente es el ridículo. Es probable que ignoren estas u otras; por esto apóyese en los diferentes medios de consulta, donde encontraran reglas de urbanidad que les auxiliaran en este y otros aspectos de su conducta social. 4. En la biblioteca Deberá tener presente que los libros son indispensables para todos, y que es una obligación cuidarlos, evitando su maltrato. Jamás tome un libro sin la autorización del encargado de la biblioteca, debiendo abstenerse de hacer ruido y hablar en voz alta en su interior. 5. En el club naval, comisariato o centro de convivencia La existencia de estos espacios, cuya finalidad es proporcionar ratos de esparcimiento, obliga a mantener el equipo y mobiliario en buen estado, debiendo poner todo el cuidado que requiera para su conservación. Al bailar, deberá hacerlo evitando modalidades exageradas, y con la mayor corrección, debiendo apegar su conducta a las reglas de urbanidad y disciplina. No formaran corrillos que estorben a las parejas, ni se estacionaran en las puertas y pasillos. Si hicieran una invitación a una dama a bailar y ésta se excusare, absténganse de insistir o repetir la invitación a otras que se encuentre junto o muy próxima mientras termine la pieza. En todo momento deberá normar su conducta al reglamento y disposiciones que rigen el funcionamiento del casino. 6. En la peluquería Deberá estar enterado, por el rol de peluquería, los días y hora que le toque, debiendo entrar y salir de la misma ordenadamente. Se abstendrá en su interior, de tomar los útiles o herramientas, de la misma. No hable en voz alta, ni use familiaridades con el personal de peluqueros. El personal femenino para el corte de cabello se sujetara a los siguientes lineamientos: a. Usarán el cabello recogido y bien peinado en un chongo de acuerdo a las directivas establecidas. El corte de cabello será recto (sin capas, degrafilados o flecos). b. Podrán usar tintes empleando colores que no sean llamativos. c. Pasarán a la peluquería una vez al mes de acuerdo al rol establecido, y serán atendidas por personal de estilistas del área de la peluquería, el corte de cabello será conforme a las directivas establecidas. El personal masculino acudirá a la peluquería cuando así lo requiera y el corte de cabello se realizará conforme a las directivas establecidas. B. Unidades de superficiesAdemás de las costumbres anteriores, no está lejano el día en que su presencia en la Armada le llevará ya sea en su forma temporal o permanente a los buques. En ellos se tienen costumbres muy propias, de las cuales las más comunes son: 1. Todo elemento de la Armada al embarcarse en un buque, saludara militarmente a la bandera nacional y después al oficial de guardia. 2. Está prohibido congregarse al pie de las escalas y portas, debiendo dejar estas siempre claras (libres), al igual que los pasillos. 3. La circulación a bordo debe ser por estribor hacia proa y por babor hacia popa, además durante los zafarranchos, la concurrencia a sus puestos deberá ser al paso veloz. 4. Pondrá esmerado esfuerzo y atención durante las prácticas y maniobras que realice a bordo del buque, no olvidando las recomendaciones de seguridad que le harán saber sus superiores. 5. Por el peligro que representa, está prohibido recargarse en las barandillas de cabo o cadenas, sentarse en la borda, cañones o accesorios de cubierta, así mismo, conversar de buque a buque o al muelle por encima de la borda. Ciertas restricciones guardan además, el fumar o dormir en algunas áreas del buque. 6. Por su importancia, el consumo de agua generalmente se encuentra reglamentado a bordo, en horarios establecidos para observar su uso moderado. 7. A bordo de los buques, el saludo militar que se haga por primera vez en la mañana a un superior deberá ser acompañado verbalmente por el “buenos días mi…” en las sucesivas y cuantas veces sea necesario corresponde tan solo el saludo, igual condición prevalece en el caso de las tardes. 8. Durante sus prácticas en máquinas, evite tocar los instrumentos y maquinas sin tener pleno conocimiento de para qué sirve y la propia autorización del encargado del departamento. 9. No deberá dirigirse al Comandante del buque a menos que este lo llame, es previamente autorizado para ello o corriendo los conductos debidos. 10. En sus prácticas de artillería, no toque, ni manipule el armamento sin autorización del Jefe de artillería. 11. Para dirigirse a un oficial o capitán que se encuentre en áreas exclusivas, deberá requerirlo por medio de un camarero y solo si el servicio así lo requiere, podrá hacerlo directamente. 12. Cada elemento de la tripulación de un buque es responsable del orden y limpieza de sus taquillas y coys, teniendo además una responsabilidad solidaria en el mantenimiento de sus áreas e inmediatas y la de todo el buque en general. 13. Aun gozando de franquicia en puerto nacional o extranjero el tripulante de un buque lleva consigo la representación de nuestro país, de la Armada de México y de su propio buque, es por ello que en todo momento deberá conducirse con acierto y señorío. C. Fuera de sus unidades o establecimientos El primer deber que a la vez es orgullo de un Marino Militar, debe ser aprender a acatar las costumbres y tradiciones del servicio naval. Las reglas de la etiqueta militar están fundadas en la costumbre y tradición siendo de estricta observancia, y son un factor importante en el mantenimiento de la disciplina. Es deber de todo Marino Militar, en todo tiempo el ser particularmente cuidadoso de su conducta y apariencia militar, recordando que la conducta caballerosa procede de las cualidades innatas y del conocimiento de las costumbres sociales. Siempre que transite por la calle, lo harán con porte marcial; evitando viajar en las bateas de vehículos no destinados para el transporte de personas (tipo redilas, torton, carretas, etc.). Si son invitados a subir a algún vehículo, lo harán después de las demás personas, cediendo el lugar de honor a quien así lo merezca; en los automóviles dicho lugar corresponde al lado derecho del asiento posterior, y en los autobuses, al lado de la ventanilla. Al descender de cualquier vehículo procuraran hacerlo siempre primero, de manera que puedan ofrecer su ayuda a las personas que lo necesiten. Al ser presentados a alguna persona civil, no debe descubrirse y si se trata de una dama saludara de mano únicamente si ella ofrece la mano. Jamás deberá hablar a otra persona con el cigarro en la boca y menos aun masticando alimento o golosina.Cuando sea invitado a comer, observará las reglas que le han enseñado, estando atento, en todo caso, a la conducta de los demás comensales, teniendo en cuenta que las costumbres sociales varían según la calidad de las personas con quienes se tenga la reunión; observara de preferencia, a los anfitriones y personas de la intimidad de estos, para proceder como ellos. Si después de tomar algún platillo, en el que forzosamente haya hecho uso de los dedos, y al finalizar la comida los meseros ofrecen el cio (pequeño plato de cristal conteniendo agua tibia), únicamente introducirá en él, las puntas, enjuagándolas y secándolas con la servilleta. No se levante de la mesa antes que las demás personas y no provoque conversaciones enojosas. Al despedirse, dará las gracias a los dueños de la casa por las atenciones recibidas. Se cubrirá, hasta que esté en la calle. Está terminantemente prohibido que el Marino Militar sea obligado por los superiores jerárquicos a organizar y/o asistir a eventos y/o reuniones sociales particulares en contra de su voluntad, debiendo informar inmediatamente de este tipo de situaciones al superior jerárquico. En caso de recibir alguna amenaza por cualquier miembro de la Institución, ya sea para obtener algún beneficio, proporcionar información o acceder obligadamente alguna petición, deberá negarse a aceptar tales situaciones e informará inmediatamente al escalón superior, con el fin de tomar las acciones correspondientes.
EL UNIFORME Acorde a la Directiva 003/14 de fecha 15 de enero de 2014 emitida por la Jefatura del Estado Mayor General, que regula el uso de Uniformes, Condecoraciones, Divisas y Distintivos de la Armada de México, todo el personal de la Secretaría de Marina deberá de portar los uniformes como se muestra a continuación:
Breve Reseña Histórica del Uniforme Naval en el Mundo Los uniformes navales se comenzaron a utilizar por primera vez en el año 1665, por los Oficiales de la Marina Real Francesa. Por el contrario, la Real Armada Británica -Royal Navy- adoptó uniformes para sus Oficiales recién en 1748, mientras que los marineros continuaron utilizando sus ropas de uso corriente. Estas ropas eran comunes a los marineros de casi todo Europa y las Colonias de América, África y las Indias. Por lo general, tenían pantalones de color blanco o con rayas, camisas blancas o colores claros y/o con cuadros o rayas, sombreros o gorros de diferentes modelos y sacos de pana, en lo posible cubiertos con brea para hacerlos impermeables. El uniforme de marinero de sombrero blanco y negro, chaqueta azul de paño y pantalones blancos fue introducido en las fuerzas navales como “de ordenanza”, en la mayoría de los países occidentales, desde el año 1857 en adelante. Actualmente es una tradición que casi todas las marinas del mundo usan uniforme de color azul y blanco. Tal práctica se inició en la Marina Inglesa en el año 1745 cuando los Oficiales pidieron al Duque de Bedford que les diseñara un uniforme, pues hasta esa fecha carecían de éste. El Rey Jorge XI, a petición del Duque de Bedford, dispuso los colores azul oscuro y blanco para Oficiales y Gente de Mar y los pantalones de los marineros (Traje azul de parada). Los aspirantes a oficiales tuvieron también su uniforme. En razón de su juventud, que no daba tiempo a una completa educación social, y en varias oportunidades, usaban sus puños como pañuelos, ya que sus uniformes no tenían bolsillos. Eso llevó, como medida correctiva, a colocarse tres botones en los puños, justamente por donde debería pasar la nariz. Según la tradición fue el Almirante Nelson el que ordenó la medida correctiva. El PANTALON: Tiene la parte inferior de las piernas sumamente ancha por la necesidad que tenían los marineros de arremangarse continuamente los pantalones, tanto para baldear como para saltar al agua cuando se varaban las embarcaciones. La tapa, en lugar de cierre, es una herencia de los pantalones usados en tiempos antiguos, y que algunos pueblos de Europa aún los utilizan. Los nueve botones que lleva el pantalón de tapabalazo simbolizan las 9 heridas que recibió el Almirante Nelson durante la batalla de Trafalgar. PAÑOLÓN O CORBATÓN (COLOR NEGRO): Proviene de los tiempos en que se usaba un pañuelo en el cuello para secarse el sudor. El color negro se originó ante la necesidad de ocultar la suciedad. Otra corriente histórica atribuye su origen en los artilleros de los tiempos antiguos de las Marinas a vela. Los marineros usaban un lienzo en la cabeza, durante los combates, amarrándolos atrás, casi sobre la nuca. Este sistema evitaba que la transpiración, mezclada con los residuos de la pólvora de los cañones que disparaban, les cayese sobre los ojos, dificultando sus movimientos. Después del combate, el lienzo era retirado de la cabeza y descendido hasta el pecho, quedando las puntas atadas sobre el pecho siendo este el origen de la corbata marinera que es modelo único y su color negro. Otra tradición establece que estos lienzos eran de varios colores, pero, en el funeral del Almirante Nelson, los marineros del buque inglés "Warmick" desfilaron con lienzos negros, lo que fue adoptado por la Marina británica y por prácticamente todas las marinas del mundo posteriormente, y al legalizarse su uso, se supone que el color negro se usa en señal de luto por la muerte del Almirante Nelson. En algunas marinas del mundo se emplea una gorra sin visera (Galleta) y de la cual penden dos cintas negras que recuerdan la antigua trenza de cabello que los marineros usaban debido a que tenían el cabello largo y al estar en cubierta el viento los despeinaba constantemente, impidiéndoles cumplir correctamente sus trabajos; por lo que resolvieron entonces, engrasarlo y unirlo en trenza. El nudo que es un cuadrado de 4, representa la rosa de los vientos por sus 4 puntos cardinales. SOLAPA O CUELLO: Antiguamente era costumbre el uso del cabello largo para el marinero, esto constituía un obstáculo en sus faenas en el mar, puesto que por el soplo de la brisa marina, su rostro era cubierto por el pelo. Para solucionar este inconveniente solían untar su pelo con grasa de ballena o de tortuga, lo que traía como consecuencia grande manchones en sus prendas de vestir, por lo que cubrían sus hombros y sus espaldas con un pañuelo al principio, y un alargado cuello después. Algunas corrientes históricas indican que la marina inglesa agregó tres franjas blancas en su borde; en memoria de las tres victorias del Almirante Nelson Abukir (1798), Copenhague (1801) y Trafalgar (1805). Por otra parte los marinos franceses atribuyen estas franjas al número de batallas ganadas en las que participaban. Las estrellas de 5 puntos bordadas en la solapa de la guerrera representan los 5 continentes y los 5 océanos. LA RABIZA: La rabiza que rodea la corbata de los Marineros es la herencia de la rabiza que antiguamente sostenía el pito marinero. TOCADO MARINERO: Los marineros sostenían sus cabellos con un pedazo de tela; los Oficiales que tenían el rango de caballeros, usaban sombreros, con el transcurso del tiempo se transformó el sombrero en la gorra de los Oficiales y Sub-Oficiales, y el pedazo de tela en el sombrero marinero. En cuanto a los oficiales y maestranza la tradición marca que el luto de la muerte del Almirante Nelson lo llevan por medio de una cinta negra en su gorra, a diferencia de la marinería que lleva este luto por medio del pañolón o corbatón negro. LA CAMISA DE RAYAS: En 1858, durante el Segundo Imperio francés, un decreto publicado en el Boletín Oficial de la Armada estableció cuál sería el uniforme oficial de los marineros: un pantalón de pata ancha, una camisa blanca con cuellos azules, un abrigo corto de lana y un jersey de rayas que permitiría visualizar y localizar mejor a los marineros en maniobras en alta mar. Además, este decreto especificaba el número de rayas (de cada color, 21 en el pecho y entre 14 y 15 en las mangas) y el grosor que éstas debían tener (20 mm para las blancas y 10 mm para las azules), además de un diseño sin botones ni cuerdas para evitar cualquier tipo de enganche durante las maniobras, podría ser considerado el origen de esta prenda. LAS PALAS: Era costumbre entre los corsarios tener una mascota y los jefes llevaban en sus hombros un loro o un papagayo, el mismo que al permanecer mucho tiempo en el hombro de su amo, ensuciaba sus ropajes, por lo cual el corsario colocaba un pedazo de cuero para mantener limpia su chaqueta. Otra corriente histórica indica que las palas se crearon ante la necesidad de contar con algo que evitara que se cayeran los terciados de los hombros. Hoy, las palas sirven para colocar las insignias del grado de quien las usa. LA COCA O VUELTA DE GALÓN: La coca o vuelta de galón superior de los puños de los uniformes de oficiales de muchas Armadas del mundo, como tantas tradiciones que hemos visto, tiene su origen posible en la vida del Almirante Nelson. Al firmarse la paz de Basilea, entre Francia y España, en 1796, Inglaterra pasó automáticamente en estado de guerra contra España. El Almirante inglés Jervis estableció su base en Lisboa. Hubo en esa ocasión la Batalla del Cabo de San Vicente, cuando Jervis navegó para impedir el pasaje de la Escuadra española, comandada por el General Córdoba y Ramos, que buscaba el Atlántico. En el combate trabado, el genio naval de Nelson se manifestó una vez más. Gracias a su talento, fue promovido a contralmirante. El 3 de julio de 1797 quedó consolidado el bloqueo de Cádiz, teniendo Nelson la comandancia. De allí navegó, con previa autorización, contra Tenerife, efectuando una primera y malograda tentativa de desembarque; aunque se haya seguida otra con más éxito, tuvo que reembarcar sus fuerzas siendo herido en la acción, en el brazo derecho. Para protegerlo, el almirante descosió uno de los galones de su puño y prendió en el botón derecho superior de su casaca, formando así una coca (o vuelta), que desde entonces se tornó tradicional en muchas Marinas. Otra tradición histórica establece que la coca es empleada únicamente por las armadas que dependían o actualmente dependen de la corona. PITO MARINERO: Los principales eventos de rutina a bordo son ordenados por toques con el Pito de Marinero. Este pito ha sido a través de los tiempos una de las piezas más características de uso personal a bordo de los barcos de guerra. Los griegos, los cartagineses y los romanos ya lo usaban para marcar el paso del ritmo de los remos en las galeras, tal cual se evidencia en el Manuscrito del Vellocino de Oro. Con el pasar de los años, el pito se convirtió en una especie de símbolo de autoridad como también de honra y honor. En Inglaterra, los almirantes de la Alta Corte (Lord) usaban un pito de oro en el cuello suspendido por una cadena de oro (rabiza), también llevaban de la misma forma un pito de plata los oficiales en comando o comandantes de menor graduación. Este tan marinero utensilio es de un muy antiguo uso a bordo: ya lo encontramos en la época de las galeras, siendo el símbolo del Almirantazgo británico desde el siglo XVIII. De metales nobles, inclusive de plata u oro, su uso se generalizó a tal punto de ser distintivo de mando. Los contramaestres de cada palo daban las órdenes para la maniobra del mismo a pito, por ser éste perfectamente audible aún en medio de fuertes temporales. En el buque escuela “Cuauhtémoc”, por lo general se mantiene esta tradición y todas las maniobras se realizan al ser transmitida la orden con este elemento casi tan antiguo en su uso como la vela. Hubo ciertas armadas que utilizaban el flautín como regulador del esfuerzo que hacían los marineros al halar un cabo, tomándolo simultáneo y permitiendo, con eso izar un peso o inclinar una vela. En casi todos los ceremoniales navales del mundo reza que el toque del pito marinero es señal de cortesía, originada en los tiempos de las embarcaciones a vela, cuando los comandantes de los navíos debían intercambiar visitas en el mar transportados en botes. Al llegar la lancha al costado del navío, se arriaba la silla de mimbre llamada canasta, en ella se izaba al visitante, halando los marineros el cabo en carrera por el combés. Para estimular y coordinar el izamiento, los contramaestres hacían sonar sus pitos. El tiempo transformó esos sonidos de estímulo en la salutación tributada a la oficialidad de las Marinas de Guerra y a ciertas autoridades nacionales. EL CORDÓN DEL GUARDIAMARINA Y DEL AYUDANTE: En las antiguas galeras el remo no era un acto voluntario, más bien era tarea de esclavos o prisioneros, se denominaban galeotes a los remeros forzados, estos eran dirigidos por un verdugo que los vigilaba y los azotaba. Este era el Cómitre y estaba dotado con un látigo que llevaba al hombro, el oficial de guardia es el responsable del funcionamiento normal de un buque, es por ello que cumple de alguna manera también el papel de verdugo y que recuerda con el símbolo del látigo, el cordón. El ayudante del Comandante es un oficial que puede considerarse, siempre está de servicio. Es por ello que también lleva cordón y además, era quien tomaba los apuntes de las órdenes que el comandante emitía, siempre estaba provisto de un lápiz para su uso y otro para reserva o para proveer al comandante, dado el caso. Las dos clavijas que lleva el cordón del ayudante representan a los lápices que antes llevaba. LAS CONDECORACIONES Y MEDALLAS, se usan del lado izquierdo en todos los uniformes. Esta costumbre viene desde los tiempos de las Cruzadas, cuando los caballeros portaban la insignia metálica de su orden para protegerse el corazón.
Las revistas para el personal naval pueden ser de dos clases: de rutina y extraordinarias. Las revistas de rutina, pueden ser una o más veces al día, a la semana o al mes, prefijadas. Las revistas extraordinarias, son cuando lo ordena la superioridad. En general, las revistas son: A. De dormitorios. B. De aseo personal. C. De armas. D. De taquillas. E. De vestuario y equipo. 1. Las revistas de dormitorios comprenden aseo y limpieza de estos. La ropa debe estar colgada en los lugares indicados para ello, tendida la cama, que no haya objetos no autorizados, etc. Esto se verificará diariamente por el oficial responsable de este servicio. 2. Las revistas de aseo personal se pasarán tres veces al día en las listas antes de pasar al comedor. 3. En las revistas de armas se pasan dos veces al mes o cuando se ordene. Se exige la absoluta limpieza del arma en todas sus partes. 4. La revista de arranche de taquillas se pasa cuando se ordene y comprende el arranche de las mismas y la colocación de la ropa y equipo en su interior. 5. La revista de vestuario y equipo se pasa cuando se ordene y comprende la revisión y estado físico que guarda. Además de las revistas antes señaladas, también existen las revistas de honores militares. Las cuales tienen por objeto hacer honores, demostrar los adelantos alcanzados por una fuerza armada o celebrar algún hecho glorioso para la Patria. En estas, las tropas son presentadas preferentemente por su Comandante titular al C. Presidente de la República, altos Jefes Militares o altos funcionarios extranjeros, cuando expresamente lo disponga la superioridad.
Cuando se viaja con autorización de la Superioridad en forma aislada, ya sea por licencia, permiso, vacaciones, comisión del servicio, etc., deberán observar las siguientes normas generales: A. Durante el viaje observarán una conducta tal, que haga honor al prestigio de la Institución y si algún superior viaja en el mismo vehículo se presentara usted con él y se pondrá a sus órdenes identificándose. B. Al arribar al lugar donde va a hacer uso de su franquicia deberá presentarse: si es en la Ciudad de México, al Cuartel General, Oficina de Control de Foráneos, en la Secretaría de Marina con el oficial de guardia en dicha oficina, para que este vise su oficio, anotando la fecha en que se presentó y tomando sus datos para su localización. En los puertos donde haya Zonas o Sectores Navales, en la sede de estos, siguiendo el mismo procedimiento. En los demás lugares en las Guarniciones de la Plaza siguiendo el mismo trámite. Esta presentación se hará vistiendo ropa de civil de manera formal. C. En caso de que al terminar su estancia en comisión del servicio y no se encuentren en las oficinas correspondientes sus pasajes de regreso, procederá a recabar constancia de ello y lo reportara a su Mando correspondiente. Si es posible, se incorporará por sus propios medios, pues es su obligación cumplir las órdenes presentándose en la fecha fijada. D. Considerando el punto anterior o alguna otra causa de fuerza mayor impide que se presente a tiempo, deberá recabar constancia de ello ante las autoridades locales o federales y se presentará ante la representación de la Armada o del Ejército en la localidad, para que ellos reporten este hecho a su Mando. En los lugares donde no haya Guarnición se presentará ante la Jefatura de Hacienda o ante las administraciones de Correo o de Telégrafos. E. Si justificadamente necesitara alguna prorroga, la solicitará con anticipación a la superioridad por conducto del Mando Naval donde se encuentre. F. Antes de salir de la plaza, debe seguir el mismo procedimiento del inciso “B” visando su oficio con la fecha de salida.
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