Con tantas técnicas y estrategias de enseñanza, en muchas ocasiones se nos olvida considerar aspectos fundamentales para que el aprendizaje se desarrolle con normalidad. Uno de estos aspectos es la diversidad cultural, un fenómeno que va en aumento como consecuencia de la globalidad y que debemos acoger con ilusión.
El filósofo inglés John Stuart Mill fue un fiel defensor de que la diversidad contribuía al enriquecimiento de la sociedad. El aula es una pequeña representación de la sociedad, por lo que esta idea es totalmente extrapolable.
Hoy nos planteamos si los profesores de hoy en día están teniendo en cuenta la diversidad en el aula y si le prestan la atención que ésta se merece.
¿Qué es la Enseñanza Culturalmente Sensible?
La diversidad en el aula debe llevarnos a una enseñanza culturalmente sensible. Este concepto se refiere a la adaptación de la enseñanza a un entorno multicultural. Para que esta adaptación sea posible es necesario que todos los participantes en el proceso educativo reconozcan y acojan la diversidad cultural de una manera natural y positiva.
En una reciente entrevista en Edutopia, Zaretta Hammon, autora del libro Culturally Responsive Teaching and The Brain (La Enseñanza Culturalmente Sensible y el Cerebro), explicó:
“Es importante construir relaciones de confianza con aquellos estudiantes que se sienten marginados o malentendidos. La neurociencia muestra claras evidencias de la relación existente entre los sentimientos, la confianza y el aprendizaje. Las hormonas que se generan con el estrés, bloquean la cognición.”
Diversidad en el Aula: Consejos Prácticos
A continuación, te ofrecemos algunos consejos para acoger la diversidad cultural y promover una enseñanza culturalmente sensible:
1. Usa Recursos Visuales
En aquellas clases en la que existe gran diversidad, el lenguaje puede convertirse en una barrera. Los alumnos pueden tener distintos niveles de fluidez, usar un vocabulario diferente o tener un entendimiento diferente de términos y conceptos abstractos.
Sin embargo, el uso de recursos visuales puede ayudar a superar este tipo de dificultades. De hecho, nuestro cerebro es capaz de procesar imágenes 60 mil veces más rápido que texto. Así, las imágenes pueden estimular la imaginación de los estudiantes y conducir a una comprensión más profunda de una materia. Además, diversos experimentos han demostrado que los recursos visuales permanecen durante más tiempo en la memoria de los estudiantes, por lo que la combinación de imágenes y texto puede llevar a la maximización del aprendizaje.
Para poner esta técnica en práctica, los mapas mentales son el mejor recurso para ello.
2. Promueve la Colaboración en Clase
Una de las maneras más efectiva de ayudar a que los estudiantes se sientan más cómodos con su entorno es a través de la integración con sus compañeros de clase. Esto no solo les ayudará a sentirse bienvenidos sino que les permitirá aprender más rápido. Como analizamos recientemente en este artículo, enseñar a otros compañeros es una manera altamente efectiva de solidificar y estructurar conocimientos.
La colaboración entre compañeros es uno de los puntos principales de metodologías como el aprendizaje basado en problemas a través de la cuál grupos de estudiantes trabajan juntos en determinados proyectos y tienen la oportunidad de compartir, debatir y analizar las ideas de los miembros del grupo. La clave de este enfoque no es simplemente trabajar en grupo, sino trabajar como parte de un equipo.
3. Cuida los Detalles
Los niños y adolescentes necesitan atención. Sin embargo, esta atención es especialmente importante en aquellos alumnos que se están adaptando a un entorno totalmente nuevo. Sin ella, existe un mayor riesgo de que se sientan marginados o excluidos.
Este tipo de sentimientos puede constituir una barra importante para su aprendizaje, por lo que es fundamental que, como profesor, dediques tiempo a escuchar, responder y animar sus esfuerzos. En estos casos, los pequeños detalles pueden marcar grandes diferencias.
4. Fomenta la Gamificación
El aprendizaje a través de juegos y experiencias prácticas hace que los estudiantes aprendan sin apenas darse cuenta, además de fortalecer aspectos tan importantes como la imaginación y la creatividad.
Esta metodología es ideal para saltar barreras culturales y trabajar con alumnos multiculturales, ya que hace que los alumnos se sumerjan en un entorno lúdico y olviden sus diferencias.
Muchos expertos hablan de la gamificación como la metodología que marcará el futuro de la educación y que posibilitará la generación de otras muchas técnicas y metodologías.
Los consejos anteriores no pretender ser exhaustivos sino un punto de comienzo para crear clases más divertidas, inclusivas y creativas, independientemente de la diversidad cultural que pueda existir.
Esto no solo beneficiará a los alumnos y su aprendizaje sino que contribuirá al enriquecimiento del profesor y sus habilidades.