La palabra fábula proviene del término latino fabŭla. Tal como explica el diccionario de la Real Academia Española (RAE), se trata de un relato de ficción que carece de gran extensión, puede estar desarrollado en verso o prosa y tiene como principal característica su voluntad didáctica. Lo habitual es que la fábula enseñe a través de una moraleja que cierra la historia en cuestión.
Las fábulas pueden presentar a seres humanos, animales y otras clases de seres como personajes. Como género literario, se trata de una narración breve que finaliza con alguna enseñanza.
Los historiadores afirman que las fábulas surgieron cuando los esclavos grecorromanos dedicados a la pedagogía buscaban transmitir nociones éticas a los pequeños.
Muchos son los autores que a lo largo de los siglos han llevado a cabo la creación de fábulas con el objetivo de entretener, de enseñar y de mostrar sus cualidades literarias.
Entre ellos destaca, sin lugar a dudas, el francés Jean de La Fontaine que realizó durante el siglo XVII una gran colección de obras enmarcadas en este tipo de género.