La interculturalidad y la diversidad en la Evaluación educativa: Convergencias y divergencias. Una mirada desde los contextos y las comunidades que lo conforman
Descripción
Convergencias y divergencias de la evaluación educativa
La interculturalidad y la diversidad en la Evaluación educativa: Convergencias y divergencias. Una mirada desde los contextos y las comunidades que lo conforman
El presente mapa conceptual nos permitirá observar la relación existente entre la diversidad, la interculturlidad y la evaluación educativa, analizaremos sus convergencias y divergencias y la importancia de tener en cuenta los contextos y las personas de la comunidad que lo conforman con la finalidad de entenderlos y nos permita tener un soporte epistemológico para la creación propuestas evaluativas que permitan la diversidad, la interculturalidad y la pertinencia de la evaluación en el contexto educativo.
Postulados de la evaluación educativa interdisciplinar:
La evaluación educativa busca aunar la calidad con la equidad
Busca cambiar la situación de un sistema dual con retórica de inclusión pero con algunas prácticas que perpetúan o reproducen las desigualdades sociales y culturales (Bourdieu
y Passeron, 1977; Monarca, 2017).
Se plantea un cambio del lenguaje de: necesidades educativas especiales por barrerar para el aprendizaje que busca que las I. E. asuman una posición de responsabilidad frente a los procesos de aprendizaje de todo el alumnado. (Miquel, E. 2002).
La evaluación educativa inclusiva e interdisciplinar debe remover todas las barreras para que el aprendizaje sea para todos, con calidad, pertinente y adecuado a los contextos y a las necesidades de la población. NO solo se deben entender como barreras aquellas del conocimiento, o discapacidades físicas sino aquellas reproducidas históricamente en el contexto social como la marginación, la pobreza, el desplazamiento, entre otras.
Se debe tener en cuenta los preocesos de mejora continua, involucrar a todos los actores de la comunidad educativa tanto de manera interna como externa de tal manera que se genere una nueva cultura escolar.
La evaluación en el proceso de cambio es indispensable, además en este proceso debe involucrarse a la comunidad educativa y esta debe ser consciente de su proceso de formación y mejora.
Dinámicas interdisciplinares para la atención a la diversidad en el aula.
Para una evaluación inclusiva e intercultural se debe partir del reconocimiento de las necesidades, individualidades y subjetividades de cada uno de los actores de la educación lo cual conducirá como lo plantea Miquel, E. (2002). a una cultura inclusiva, en la cual es fundamenntal el fortalecimiento de valores inclusivos y la participación de la comunidad, así mismo la creación y aplicación e políticias es fundamenal para el desarrollo de unas practicas inclusivas e interculturales en las cuales:
todos se sientan acogidos, todos los actores qeu hacen parte de la comunidad participen, colaboren y se apoyen entre sí, se fomenten los valores interculturales y exista una valoración positiva del docente.
¿qué es la evaluación educativa interdisciplinar?
Uno de los ejes fundamentales de la educación es la evaluación como proceso que permite analizar, comprender, reconocer lo aprendido en el proceso formativo. En este sentido se hace necesario mirar al momento de evaluar, todas las dimensinoes del ser, no solo aspectos conginitivos sino también su ser, su diversidad, su individualidad y subjetividad, es decir, su interculturalidad e interdisciplinariedad.
observemos:
la repartición de los recursos. Señalan que mientras la distribución se realice en función del número de alumnos y alumnas con dictámenes de escolarización diferentes a la modalidad ordinaria, habrá que seguir cuestionando el derecho de las personas a la educación inclusiva
La evaluación educativa atiende a políticas institucionales muchas veces alejadas del contexto y de la situación de las personas.
La evaluación psicopedagógica conlleva a la creación de medidas de adaptación curricular que en ocasiones puede conllevar a la exclusción social de acuerdo a lo planteado por Rodríguez, P. (2019).
La inexistencia de un protocolo de evaluación de necesidades de apoyo en todas las áreas del desarrollo de la persona lleva a que las decisiones emitidas en el dictamen de escolarización no descansen en una evaluación holística del alumnado.
Se observa la diversidad como un elemento aleado de la realidad y del contexto, se plantean adecuaciones curriculares que buscan minimizar o reducir las habilidades de los estudiantes y no enfocarse en otras habilidades que puedan desarrollar para su crecimiento personal y social.
En ocasiones se mira el estudiante con alguna necesidad educativa es pecial como un problema o un caso que hay que tratar, se hieren los sentimientos de la persona y de la familia
Otra incoherencia mencionada, más allá de la evaluación psicopedagógica, que les produce un gran resquemor tanto a ellas como a las familias tiene que ver con el hecho de que el sistema no contempla una educación inclusiva después de la educación obligatoria como lo plantea Otra incoherencia mencionada, más allá de la evaluación psicopedagógica, que les produce un gran resquemor tanto a ellas como a las familias tiene que ver con el hecho de que el sistema no contempla una educación inclusiva después de la educación obligatoria, no hay un futuro claro ni un horizonte inclusivo para que se sigan fortaleciendo los sueños de las personas que estpan dentro del proceso inclusivo.
la evaluación psicopedagógica constituye un elemento más en un sistema de mil piezas que conviene revisar de arriba a abajo si se pretende que la educación inclusiva se convierta en una realidad de nuestro sistema educativo.
Convergencias y divergencias en la evaluación educativa
Se debe involucrar al grupo en la discusión en la que la propia dinámica de la discusión sirva como herramienta que posibilita profundizar en las preocupaciones, sentimientos y actitudes de participantes que comparten un mismo problema.
Es indispensable la función que ocupa el centro frente al proceso de evaluación, es decir, se debe evaluar la evaluación como un proceso es iconsciente que genera cambio en la dinámica de los evaluados.
Es importante comprender el aspecto familiar, la motivación y relación familiar que exista entre el centro educativo, la comunidad educativa y la familia ayuda a la motivación del estudiante y aconseguir avances en su proceso.
Se debe dejar de hablar de mínimos y de dificultades y dar más valor a lo que se logra, a lo que se alcanza.
Se debe colocar como centro a la persona y su derecho, sistematizar las experiencias y compartirlas con la comunidad educativa.
Se debe entender a la persona más allá de la etiqueta, esta solo es un mínimo, al considerear los apoyos deben hacerse desde la globalidad del ser y atendiendo a sus fortalezas y a su interacción con el entorno.
Se debe promover el aprendizaje colaborativo, se deben analizar las barreras para el aprendizaje así como las oportunidades y fotalezas para el mismo y partiendo de estas para la creación de apoyos.
Se debe viabilizar un un modelo curricular que imaginamos mucho más abierto y flexible, en el que los objetivos están definidos exclusivamente en términos competenciales, y tras el que el profesorado es concebido como un gran profesional con capacidad de decisión.
Por encima de ello, educar juntos es necesario para enseñar y aprender a convivir, y éticamente cualquier niño, niña, o joven, tiene que poder asistir al colegio más cercano a su domicilio, al mismo en el que se educan sus hermanos y hermanas.
La evaluación debe trascender con mucho las simples etiquetas diagnósticas, pues éstas explican una mínima variabilidad del comportamiento humano y en ningún caso deben ser el único fundamento de una decisión educativa.
sería conveniente escuchar también las voces del profesorado, de los equipos directivos, de las familias y del propio alumnado.