Mapa conceptual_ Fundamentos Históricos y Epistemológicos_ Raquel Florez
Descripción
Mapa conceptual de acuerdo a las lecturas Mora, V. A. I. (2004). La evaluación educativa: concepto, períodos y modelos. Actualidades Investigativas en Educación, 4(2), pp. 1-28. https://www.redalyc.org/pdf/447/44740211.pdf y Moreno, O. T. (2014). Posturas epistemológicas frente a la evaluación y sus implicaciones en el currículo. Perspectiva Educacional. Formación de Profesores, 53(1), pp. 3-18. http://www.perspectivaeducacional.cl/index.php/peducacional/article/viewFile/%20211/96.
La evaluación se puede entender de diversas maneras, dependiendo de las necesidades, propósitos u objetivos de la institución educativa, tales como: el control y la medición, el enjuiciamiento de la validez del objetivo, la rendición de cuentas, por citar algunos propósitos.
Son aquellos que cimientan o soportan la aplicación de la evaulación.
LA EVALUACIÓN COMO TECNOLOGÍA
El currículum es entendido como producto, el maestro juega un papel secundario, una vez que no nulo, en la preparación de las metas educativos. El estudiante tampoco participa, en todo caso se le estima solo como persona con un ‘conjunto de propiedades psicológicas’ que, se presume actúa, procesa, siente, aprende, de cierta forma bajo ciertas situaciones.
Esta concepción del currículum, sus componentes y el papel de los sujetos implicados conlleva a concebir la evaluación como un elemento de control a distintos niveles: de los profesores sobre los alumnos, del centro educativo sobre los profesores y alumnos, y de los administradores y diseñadores del currículo sobre el sistema.
El discurso de la evaluación es hoy en día en su mayor parte un discurso de la tecnología para tomar elecciones en relación con la categorización, la selección y la certificación, fundamentadas en mediciones de lo cual las personas saben.
LA EVALUACIÓN COMO PRÁCTICA CULTURAL
La evaluación pertenece al entorno de lo a gusto, lo cual desea mencionar que se localiza en el campo de la relación humana y que está referente con la relación entre maestro y alumnos.
LA EVALUACIÓN COMO PRÁCTICA SOCIO-POLÍTICA
Amplía la comprensión de su empleo como un mecanismo para ejercer el poder, para seleccionar y clasificar a los individuos según sus méritos, funciones que siguen vigentes aun cuando el papel de la evaluación se ha ampliado y diversificado, a partir de los cambios que la sociedad ha sufrido.
Las implicaciones curriculares también parecen claras, al principio mediante la evaluación se descubría el nuevo conocimiento o se legitimaba el conocimiento existente, después se empleó para verificar el aprendizaje individual y la adquisición del conocimiento establecido.
Consiste en que las personas, niños incluidos, son fundamentalmente racionales.
Todos los participantes habrán de ser considerados sujetos y no objetos.