Cuando utilizamos una función dentro de otra, tenemos una función anidada. Las funciones
que “metemos dentro” de otra función actúan como argumentos de la función principal
La segunda función SI es parte del argumento de la función SI principal
Cuando frente a una condición tenemos dos o más posibilidades, tenemos que anidar una
función SI dentro de otra función SI.
Cada una de las funciones SI (la principal y la anidada) conservan su estructura, con tres
elementos en el argumento.