Luisa de Marillac nació en París el 12 de agosto de 1591. Luis de Marillac la llamará «mi hija, mi natural», se refiere a ella diciendo: «…que había sido su mayor consuelo en este mundo», y afirma «que Dios se la había dado para que fuera el reposo de su espíritu en las aflicciones de la vida».
Luis de Marillac es el menos brillante de sus hermanos y en 1604 murió tempranamente de muerte natural. Otro Luis de Marillac (no era raro encontrar dos nombres idénticos entre los miembros de una misma familia), será Mariscal de Francia; Miguel de Marillac, Superintendente de finanzas y Guardasellos del Reino; Valentina, casada con Octavio de Attichy, jefe de la Casa de la reina María de Médicis, jefe de su Consejo e Intendente de sus finanzas. Mezclados intensamente en los avatares políticos, el Mariscal será ejecutado en la plaza de Grève el 10 de mayo de 1632, mientras que Miguel moría, pocos meses después, en la prisión de Châteaudun. Quince años antes, Valentina y su esposo, habían muerto por enfermedad dejando siete huérfanos.