El pecado del ser humano es lo que contamina la tierra. ¿Por qué razón? El pecado conlleva a traspasar los límites, a quitar el equilibro que Dios dispuso de antemano para que vivamos y gocemos de su creación. La ambición del hombre lo lleva a agotar sus recursos, a destruir con el anhelo de tener más riqueza material, pasando por encima de otros seres humanos con tal de acumular más dinero y contaminando el agua y la tierra, para supuestamente mantener su estilo de vida. Es cierto que Dios nos permitió aprovechar los recursos, pero también nos enseñó a hacerlo de forma equilibrada, cuidando la naturaleza y los animales, manteniendo el respeto por el bienestar del prójimo, entre otras cosas.
Es el corazón del hombre donde radica el problema, es de donde sale lo que contamina al hombre. Por lo tanto, se necesitó una solución radical, por eso Dios envió a su hijo en la carne, para que por la fe en Él, su sangre limpiará nuestras conciencias de obras muertas y sirvamos al Dios vivo.
Si en el interior del hombre inicia la contaminación del ambiente, debemos mirar por tanto desde la perspectiva correcta y arrancar el problema de raíz, acudiendo a Cristo, para que limpie nuestro corazón y llevando a otros el mensaje de salvación por medio de Cristo, para que por este mensaje sea limpiadas la vidas de todos lo que en Él crean.
Diapositiva 3
DEJA DE SER UN OBSERVADOR PASIVO DE LA DESTRUCCIÓN DE NUESTRO MUNDO Y TODOS LOS SERES QUE EN ÉL HABITAN,HAZ ALGO PARA LOGRAR EL CAMBIO REAL Y RECUERDA LO PEOR QUE PUEDE HACER ES NO HACER NADA RECUERDA QUE DIOS NOS ESTA VIENDO Y SABE LO MALO QUE ESTAMOS HACIENDO NO PERMITAS QUE NUESTRO PLANETA SE ACABÉ
DEJA DE SER UN OBSERVADOR PASIVO DE LA DESTRUCCÍON DE NUESTRO MUNDO Y TODOS LOS SERES QUE EN EL HABITAN, HAZ ALGO PARA LOGRAR EL CAMBIO REAL Y RECUERDA LO PEOR QUE PUEDES HACER ES NO HACER NADA.
AMA Y QUIERE A TU PLANETA POR QUE NUNCA SABES LO QUE LLEGUE A PASAR DENTRO DE EL, APROVECHA LAS MARAVILLOSAS COSAS QUE DIOS HIZO POR NOSOTROS COMO ESTE MARAVILLOSO PLANETA QUE CADA DÍA NOS SORPRENDE MAS