Disrafia espinal abierta que
compromete la médula espinal,
la que junto a las meninges y el
líquido cefalorraquideo, están
contenidos en un saco quístico
que protruye a través del
defecto óseo, pudiendo o no
estar roto
Manifestaciones clínicas
secundarias al daño
medular
Parálisis o paresia
Alteración de la
sensibilidad superficial
y profunda