Cuando queremos cambiar ciertos hábitos o costumbres poco constructivas debemos ir a Jesús, el verdadero transformador de vidas, reconociendo nuestra incapacidad como seres humanos de generar cambios en uno mismo, puesto que, la religión y el dogma entre otros medios "productores de cambios" solo generan cambios externos que poco a poco desaparecen e imponen reglas que el ser humano no puede llegar a cumplir. ¡Necesitamos un cambio genuino en nuestra forma de ser, y la verdadera opcion es Jesús!
Basado en el principio biblico: Romanos 7:19,24,25
Nota:
19: Porque no hago el bien que quiero, sino el mal que no quiero, eso hago.
24: ¡Miserable de mí! ¿quién me librará de este cuerpo de muerte?
25: Gracias doy a Dios, por Jesucristo Señor nuestro. Así que, yo mismo con la mente sirvo a la ley de Dios, mas con la carne a la ley del pecado.
El apóstol pablo experimentó frustración
Nota:
ver vercículo 19 y 24.
Muchas veces queremos hacer lo bueno, pero terminamos
haciendo lo malo.
La lucha más grande que tendrás que
enfrentar NO es con el diablo, sino contigo
mismo.
Dios es el único que puede calmar
el conflicto que hay en tu interior
Hablale a Dios de tu
incapacidad como ser
humano.
Si usted quiere que una
persona cambie no la
presione, hay que pagar
el precio en oración.
Tú debes aportar al
cambio del otro.
Ayuda, no acuses;
no apliques "al
caido caerle"
Quien tranforma al hombre es
Jesucristo, NO la religión ni el
dogma...
Jesucristo: produce cambios
de adentro hacia afuera
Sólo Él puede transformar un
corazón de piedra en uno de
carne.
Religión, dogma, entre otros:
producen cambios externos. Dan
un conjunto de reglas que el ser
humano no alcanza a cumplir.