La vagancia en la época del siglo XIX, no es más que el
término utilizado para referirse a la acción del no
accionar de los individuos que no realizaban tareas
oficiales y/o reguladas por el Estado u diferentes gremios.
Debido a la vagancia se intentó controlar:
El tiempo en el trabajo
El tiempo de ocio
Espacios de esparcimiento, paseos y ferias
Abandono de responsabilidades laborales y las huelgas
Elaboración de licores, tabernas y juegos de azar
Para controlar dicha vagancia se instauraron leyes que perjudicaban a los individuos
Con explotación
Adultos» 6 días x 15 horas diarias
Niños» 12 horas +13/-18 y 8 horas +9/-13
Estas leyes castigaban a los individuos, entre los que se veían afectados se encontraban:
Los castigados que eran considerados como delincuentes
Quienes tenía la capacidad para trabajar, pero no lo hacían
Quienes poseían alguna imposibilidad de cumplir con ciertas exigencias sociales
Y entre otros como; Locos, enfermos, ancianos, pobres, mendigos, españoles negros y mestizos e
indígenas
Los castigos que se dieron fueron:
Arrestos y encierro en prisiones, asilos mentales (aislamiento, oscuridad, camisas de fuerza, baños
fríos y castigos corporales)
Destierros
Mala alimentación y esclavitud
Penas militares
Trabajos forzados y con muchas horas laborales (trabajos en las minas, construcción de obra
pública)