Para demostrar la existencia de Dios no se
baso en la fe sino que uso el método
inductivo del conocimiento, el cual se basa
en la observación de las cosas y la
experiencia.
propone 5 vías argumentativas
Primera vía: Movimiento
Todas las cosas se mueven, y
siempre hay una causa de ese
movimiento. Pero ese movimiento
debió iniciar en un principio: Un
motor único y eterno que no
depende de nada para ser movido,
sino que se mueve por sí mismo.
Ese primer motor es Dios.
Segunda vía: Eficiencia
Todas las cosas son causas
eficientes que no pueden ser
causas de si mismas. Tampoco
podemos pensar que ha habido
una serie infinita de causas
eficientes, por lo que debe existir
una primera causa eficiente
incausada, esa primera causa
eficiente incausada es Dios.
Tercera vía: Contingencia
Todos los seres son contingentes,
es decir, tienen un principio y un
fin por lo que no son necesarios. Si
todos los seres fueran
contingentes no existieran, pero
existen, por lo que debe existir un
ser no contingente que los cause.
Ese ser no contingente es Dios.
Cuarta vía: Grados de perfección
En la naturaleza existen
diferentes grados de perfección
sin que ninguna de las cosas
lleguen a ser completamente
perfectas. Debe existir un ser
completamente perfecto para que
las demás cosas tengan un
modelo con el cual compararse.
Ese ser perfecto es Dios.
Quinta vía: Finalidad
Todos los entes de la naturaleza,
aun los carentes de inteligencia,
participan de forma intencionada
en el orden del universo.
Entonces, esas cosas sin
inteligencia deben ser dirigidas
por una inteligencia suprema que
ordena las cosas para dirigirlas a
su fin. Esa inteligencia suprema
es Dios.
Biografia
Nació en el siglo XIII (1225 aprox.). Ingresó a la
orden de los dominicos a los 19 años. En 1245
se fue a estudiar a París y enseñó en la
universidad de esa ciudad y compuso sus
primeras obras teológicas. Cuatro años mas
tarde se le otorgó la cátedra de doctor. Para
1266 empezó a escribir la mas famosa de sus
obras: "Suma Teológica".Fue rector de la
Universidad de Nápoles. Falleció en la Abadía
de Fosa Nuova el 7 de marzo de 1274. Dejo
como legado una extensa bibliografía católica
que aun son objeto de estudio. En 1323 fue
canonizado por Juan XXII y en 1567 proclamado
doctor de la iglesia.