La Organización Mundial de la Salud (OMS) define la
eutanasia como aquella "acción del médico que provoca
deliberadamente la muerte del paciente".
Esta definición resalta la intención del acto médico, es decir, el
querer provocar voluntariamente la muerte del otro. La
eutanasia se puede realizar por acción directa: proporcionando
una inyección letal al enfermo, o por acción indirecta: no
proporcionando el soporte básico para la supervivencia del
mismo. En ambos casos, la finalidad es la misma: acabar con
una vida enferma.
Esta acción sobre el enfermo, con intención de quitarle la
vida, se llamaba, se llama y debería seguir llamándose
homicidio. La información y conocimiento del paciente
sobre su enfermedad y su demanda libre y voluntaria de
poner fin a su vida, el llamado suicidio asistido, no
modifica que sea un homicidio, ya que lo que se propone
entra en grave conflicto con los principios rectores del
Derecho y de la Medicina hasta nuestros días.
se divide en dos clases
activa
Consiste en provocar la muerte de modo directo. Puede
recurrirse a fármacos que en sobredosis generan efectos
mortíferos.
pasiva
Se omite o se suspende el tratamiento de un proceso
nosológico determinado (por ejemplo una bronconeumonía),
o la alimentación por cualquier vía, con lo cual se precipita el
término de la vida. Es una muerte por omisión.
aborto
El aborto es una manera de terminar un
embarazo.
Algunas veces, un embrión o feto deja de
desarrollarse y el cuerpo lo expulsa
naturalmente, lo que se conoce como un
aborto espontáneo.
Una mujer también puede elegir
poner fin a un embarazo mediante un
aborto inducido.
Para esto existen dos métodos: el aborto quirúrgico y el
aborto médico. En ambos métodos debe haber supervisión
médica y la comprobación de un embarazo.
Es uno de los procedimientos médicos más seguros que
existen y en la mayoría de las veces se realiza de forma
ambulatoria con anestesia local, dura aproximadamente de 7
a 10 minutos. Existen varios procedimientos que pueden ser
utilizados. Entre los más conocidos se encuentran el de
aspiración manual, dilatación y succión con curetaje y
dilatación y evacuación.
Se refiere al uso de un medicamento o una combinación de
medicamentos que se administran vía oral, vaginal y/o
intramuscular. Esto es un proceso paulatino que puede durar
hasta 14 días. El aborto médico más común se realiza utilizando
misoprostol, medicamento que causa que el útero se contraiga
y se vacíe. Cuando el medicamento se emplea hasta 9 semanas
después de la última menstruación, tiene una efectividad entre
85 y 90 %. Esta alternativa solamente se puede utilizar bajo la
supervisión médica.
El término del embarazo es
usualmente medido desde el
primer día de la última
menstruación
que dice la biblia
La Biblia no menciona específicamente la eutanasia, pero sí
menciona temas relacionados a esta. La eutanasia es
conocida por diferentes términos tales como: suicidio
asistido, muerte misericordiosa, etc. En sí, es el acto de asistir
a alguien en su propia muerte y que se encuentra
terminalmente enfermo, en sufrimiento y en gran dolor. El
objetivo del suicidio asistido es prevenir la continuidad del
dolor.
La Biblia dice que no debemos matar (Éxodo 20:13: "No
matarás."). El homicidio es la forma ilegal de quitarle a
alguien la vida y matar es, quitar, de forma ilegal la vida de
alguien.
. Hablando técnicamente, si una nación dice que la eutanasia
es legal, entonces, a nivel humano no sería asesinato. Pero
como las sociedades con frecuencia legislan temas morales
en contra vía de la Biblia, solo por el hecho de que una
sociedad diga que la eutanasia es buena, no significa que esta
lo sea.
Debemos obedecer a Dios antes que a los hombres (Hechos
5:29: “Respondiendo Pedro y los apóstoles, dijeron: Es
necesario obedecer a Dios antes que a los hombres.”
Somos hechos a la imagen de Dios (Gn 1:26), y es el Señor
quien nos da la vida (Job 33:4: “El espíritu de Dios me hizo, Y el
soplo del Omnipotente me dio vida.”) y es Él quien ha
determinado nuestros días (Job 14:5: “Ciertamente sus días
están determinados, Y el número de sus meses está cerca de
ti; Le pusiste límites, de los cuales no pasará.”). Esto significa
que Dios es Señor soberano y es quien determina el día que
moriremos. Por lo tanto, no debemos usurpar la autoridad de
Dios.
La Biblia nunca menciona específicamente el problema del
aborto. Sin embargo, hay numerosas enseñanzas en la Escritura
que hacen totalmente claro la visión de Dios sobre el aborto.
Jeremías 1:5 nos dice que Dios nos conoce antes de formarnos
en el vientre materno. El Salmo 139:13-16 nos habla del papel
activo de Dios en nuestra creación y formación en la matriz.
Éxodo 21:22-25
prescribe el mismo castigo para alguien que cause la muerte de
un bebé en el útero que para alguien que cometa un asesinato.
Esto indica claramente que Dios considera a un bebé en la matriz
del mismo modo que lo hace con un ser humano plenamente
desarrollado como adulto.
Para el cristiano, el aborto no es un asunto de elección de los
derechos de la mujer. Es un asunto de la vida o la muerte de un ser
humano hecho a la imagen de Dios. (Génesis 1:26-27; 9:6).