La retinopatía hipertensiva es el daño de los
vasos retinianos causado por hipertensión.
Son alteraciones retinianas, coroideas y del nervio óptico
secundarias a la elevación aguda de la presión arterial
sistémica.
FACTORES DE RIESGO
Diabetes
Hipertensión arterial descontrolada
Obesidad
Sexo Masculino
Edad >60 años
Tabaquismo
Consumo de sal aumentado
Hipercolesterolemia
Poca actividad física
Fisiopatología
La elevación aguda de la presión arterial causa
normalmente una contracción reversible de los vasos
sanguíneos retinianos, y la crisis hipertensiva puede
producir edema de papila
La hipertensión más prolongada o intensa produce
alteraciones vasculares exudativas, consecuencia de la
lesión, y necrosis endoteliales.
Tratamiento Integral
El diagnóstico de la retinopatía hipertensiva es clínico, y se hace
cuando se visualizan los cambios vasculares retinianos, coroideos
o de la papila óptica característicos en la biomicroscopia con
lámpara de hendidura.
La lesión confirmada de los órganos diana puede influir en la pauta
de tratamiento y seguimiento de los pacientes.
No existe un tratamiento oftalmológico específico para la retinopatía
El tratamiento es un buen control de la tensión arterial,
con el que se puede obtener la reversibilidad de las
lesiones
Tratamiento de HA
con antihipertensivos
Activación física y ejercicio
constantes
Control de peso
Dieta baja en grasas y sal
Seguimiento
El médico tratante debe hacer un fondo de ojo cada
que el paciente asista a consulta
Se recomienda cada 6 meses
Para el seguimiento puede ser
variable y depende de la gravedad
Se empieza con una cita cada mes por 3 meses, si en esos 3 meses
evoluciona bien, pasamos a 3 meses la cita, luego 6 meses y
finalmente 1 año