Entre los chicos pueden existir peleas, bromas o burlas, pero si esto se produce de manera sostenida
y sistemática sobre un niño en particular la diversión se convierte en agresión. Ningún niño merece
ser molestado, manipulado u hostigado por otro.
¿Cuáles son las características de un niño que hostiga a los
demás?
Por lo general le cuesta reconocer un error. No puede ponerse en el lugar del otro con facilidad. Le
cuesta pedir disculpas y reparar una conducta considerada inapropiada. Es rebelde e inquieto y le
cuesta adaptarse a las normas de convivencia. No acepta los límites con facilidad. Tiene reacciones
impulsivas. Es autoritario y agresivo de palabra. Suele tener mal comportamiento escolar. Molesta y
desvaloriza a sus compañeros en clase.
¿Que es el bullying escolar?
es un comportamiento que se caracteriza básicamente por
maltratar, humillar y agredir física o psíquicamente a un
compañero. Así como también burlarse de él, ignorarlo,
asustarlo y dejarlo de lado sistemáticamente. La principal
característica de esta conducta es que suele prolongarse en el
tiempo y va dirigida a una única persona (compañero o
compañera) con el único objetivo de dañarla. Esta situación
genera un conflicto muy grave que no sólo afecta al niño
acosado sino también al entorno en el que se mueve.
¿Por qué algunos niños son víctimas del acoso escolar?
En muchos casos los pequeños son víctimas de acoso escolar por sus características físicas
diferentes del resto. Pueden ser más altos, más bajos, más delgados o más gordos, rubios o
pelirrojos, con frenos (brackets) o anteojos. Cualquier condición diferente del resto puede generar
este acoso. Y en otros casos, sin embargo, el acoso gira en torno a su personalidad. Pueden ser
tímidos o demasiado extrovertidos, aunque por lo general los pequeños que más sufren esta
conducta tienden a ser muy frágiles. El hostigador percibe que no puede defenderse de él y es por
ello que abusa reiteradamente.
Logros
Nota:
Listado de logros
¿Cómo podemos evitarlo?
Podemos atajarlo con las siguientes medidas:
Trabajando con los niños favoreciendo la resolución de problemas a través de la palabra y la
participación de todos por igual.
Respetando las diferencias y no tomándolas como deficiencias.
Haciendo partícipes a los padres de estas acciones.
Capacitando a todos los integrantes de la comunidad educativa para detectar el acoso.