Definición: La neumonía
adquirida en la comunidad (NAC)
es una infección aguda del
parénquima pulmonar que afecta
a pacientes no hospitalizados.
Se caracteriza por la aparición de
fiebre y/o síntomas respiratorios, junto
con la presencia de infiltrados
pulmonares en la radiografía de tórax.
Establecer el diagnóstico
etiológico y realizar un
tratamiento antibiótico
adecuado resulta en muchas
ocasiones una tarea
complicada.
Dicho proceso genera un infiltrado celular
inflamatorio del espacio alveolar denominado
consolidación, que altera el intercambio gaseoso.
Para considerar una neumonía como una
neumonía adquirida en la comunidad (NAC),
el paciente debe presentar el inicio de signos
y síntomas al no estar hospitalizado o en las
primeras 48 horas de ingreso.
Clasificación
NAC típica.
NAC atípica.
NAC no clasificable.
Fisiopatología
El mecanismo fisiopatológico de la NAC
comienza cuando el sistema de defensa
pulmonar es sobrepasado por
microrganismos patógenos, los cuales se
depositan en la superficie alveolar.
Factores genéticos, como deficiencias
particulares del sistema de defensa, o
medioambientales, como el tabaquismo y el
alcoholismo, pueden deteriorar la
funcionalidad del sistema y facilitar la
aparición de una neumonía.
El diagnóstico se realiza a partir de los
datos obtenidos durante la anamnesis y
el examen físico.
Interpretación de imágenes y
exámenes paraclínicos .
Criterios para un diagnóstico adecuado:
Al menos un signo, como dificultad
respiratoria, matidez, estertores,
egofonía, frémito vocal
aumentado y aumento de las
vibraciones vocales a la palpación.
Síntomas como fiebre, malestar
general, tos con expectoración,
disnea, etc.
Signos de respuesta inflamatoria sistémica,
como fiebre > 38 °C o hipotermia < 36 °C,
frecuencia cardiaca > 90 l. p. m., frecuencia
respiratoria > 30 r. p. m., leucocitosis < 12.000
cel./ mm3 o leucopenia < 4000 cel./mm3 , o
presencia de cayados de > 10%.
Radiografía de tórax con infiltrados
alveolares, intersticiales segmentarios o
de cualquier tipo en más de un lóbulo, o
derrame pleural.
Ausencia de cualquier otra
enfermedad que explique los
síntomas.
Considerar neumonía por aspiración en
pacientes cuya aspiración fue
presenciada, alteración del estado de
conciencia, trastornos de la deglución,
obstrucción intestinal o alteración del
reflejo nauseoso, o con hallazgos en la
radiografía de tórax en lóbulos inferiores
(aspiración sentado).
Tromboembolismo pulmonar,
neumonitis por radiación o
medicamentos y hemorragia
alveolar.
Tratamiento
El tratamiento inicial de la NAC es
empírico, pues no existe una herramienta
diagnóstica con una sensibilidad y
especificidad del 100%.
Medidas
recomendadas en
todos los pacientes.
Suplencia de oxígeno para
lograr una saturación mayor
del 90%.
Hidratación y balance
electrolítico.
Profilaxis para
eventos
tromboembólicos.
Terapia respiratoria, manejo
de enfermedades
concomitantes.
Monitorización hemodinámica y
respiratoria no invasiva para
pacientes que se encuentren en la
UCI, más reanimación protocolizada
(hipoperfusión tisular inducida por
sepsis).
Tratamiento antibiótico:
El uso de macrólidos se ha convertido en una
herramienta terapéutica de gran impacto
para la NAC, en especial cuando se quiere
garantizar el cubrimiento de gérmenes
atípicos y en cuadros de NAC severa.
La terapia con corticoesteroides se ha
venido manejando como una opción
importante al enfrentarse a los pacientes
con NAC. Sus propiedades radican
principalmente en la inhibición de la
expresión de citocinas proinflamatorias.
Neumonía atípica
El término neumonía atípica se
utiliza para describir la
manifestación inusual de
neumonía.
Neumonía causada por un
grupo de agentes patógenos
relativamente comunes
(Mycoplasma pneumoniae,
Chlamydophila pneumoniae,
Legionella spp y algunos virus).