La mayor parte de los problemas de
conducta que muestran los niños pueden
explicarse como un desajuste dentro de
su contexto familiar, escolar o social.
Los cambios sociales de valores y normas se producen actualmente a una velocidad
vertiginosa
la gravedad o intensidad de los problemas de conducta es amplia y va desde
problemas cotidianos más o menos intensos o incómodos hasta los desórdenes el
comportamiento recogidos en las clasificaciones internacionales
Gran parte de estos problemas se presenta ya desde la infancia y en muchos de
ellos puede observarse la progresión de su gravedad.
En el nivel preventivo son necesarias actuaciones y programas dirigidos a los padres
y al ámbito escolar que faciliten al niño un entorno sano y acogedor
Encaminados a mejorar el autocontrol, prevenir la violencia, promocionar estrategias
adecuadas de resolución de conflictos, desarrollar un autoconcepto positivo, mejorar la
competencia social y escolar e incrementar la tolerancia y el respeto a la diversidad.