Desigualdad y pobreza en Colombia:
¿cuál es el dilema?
La pobreza se entiende como un fenómeno
integral que vincula las aristas monetarias,
de condiciones de vida y subjetivas, de un
colectivo social en un contexto y tiempo
determinados.
El fenómeno de la pobreza es la situación que debe ser
analizada desde todas sus esferas, pues las políticas
propuestas para mejorar la calidad de vida de los
habitantes de un territorio en particular, o del mundo en
general, deben estar direccionadas a combatirla.
La desigualdad ha sido tomada
como una problemática que, en el
fondo, no tiene grandes
repercusiones sobre la calidad de
vida de las personas, pues es
menester considerar que no todos
tienen las mismas capacidades,
intereses, gustos, etc. que conlleven
a una igualdad absoluta. La pobreza
es uno de los grandes males que
apremian a millones de personas en
el mundo y que tiene que encabezar
la agenda de intervención y política
pública por parte de los gobiernos y
las organizaciones internacionales.
La disyuntiva entre pobreza y desigualdad
conlleva a afirmar que lo trascendental es
conducir la lucha hacia aquellos que están
bajo la línea de la pobreza para que superen
dichas condiciones y alcancen un estándar
de vida adecuado, satisfagan sus
necesidades básicas y gocen de mayor
bienestar. Los datos demuestran que la
igualdad está presente en los extremos del
espectro del bienestar o desarrollo y que la
desigualdad está en sus partes intermedias.
Por tanto, direccionar la lucha a combatir la
desigualdad de manera desmedida en los
territorios conlleva a su población, de forma
inexorable, a los niveles inferiores del
bienestar, es decir, a la pobreza.
Factores asociados a la
pobreza subjetiva en
Colombia: un estudio
desde el enfoque de las
capacidades y la
economía de la
felicidad.
La percepción subjetiva
de la pobreza se basa
en las apreciaciones
que tienen los
individuos acerca de
sus condiciones de
vida.
La percepción subjetiva de
la pobreza aporta
elementos de análisis
mejorando la comprensión
de lo que sienten y
piensan las personas en
condición de pobreza para
facilitar el diseño de
políticas eficientes.
La pobreza objetiva es
una situación de
carencia de ingresos
para adquirir una
canasta básica de
consumo. La pobreza
subjetiva considera la
percepción de los
individuos sobre su
bienestar.
La percepción subjetiva de la
pobreza constituye un
indicador del bienestar de la
sociedad, el cual refleja el
grado de desarrollo observado
por los propios habitantes del
país.
Renta básica universal: herramienta
para afrontar pobreza y precariedad
laboral en Colombia
La estructuración de unos elementos necesarios de
renta básica que contribuyan a disminuir las
problemáticas, contribuyen a paliar la faceta
monetaria de la pobreza y la precariedad, si se
reconoce de manera conjunta con la garantía de los
derechos sociales y económicos que ya se han
materializado.
La pobreza debe ser vista como un concepto multidimensional
que aborda un conjunto de vivencias como la desnutrición, el
infraconsumo de bienes y servicios de primera necesidad, los
bajos niveles educativos, la inestabilidad de la incursión en el
mercado laboral, y los ambientes habitacionales y sanitarios
precarios; también ha de entenderse como un juicio de valor
sobre los niveles de bienestar aceptables, cuya privación
resulte intolerable según cada grupo social.
Un opción para enfrentar la faceta monetaria de la pobreza y la
precariedad es la implementación de la renta básica universal.
Que hacemos contra la pobreza
Las desigualdades entre personas y grupos no
son el resultado directo de características
innatas o biológicas, sino consecuencia de
decisiones colectivas (humanas) en el ámbito
económico, político e institucional, por tanto
para reducir la pobreza, desigualdad y exclusión
social, se deben abordar estrategias desde
ámbitos estructural, institucional y de vida
cotidiana, enfocadas tanto desde el punto de
vista de la universalidad de los ciudadanos
como de la especificidad de las personas.
Existen múltiples líneas de desigualdad, a su vez las
desigualdades se pueden manifestar en diferentes
ámbitos como el social, el cultural y el económico.
Se deben planear alternativas de lucha contra la
pobreza y exclusión desde el nivel estructural,
institucional de forma inmediata.
Los servicios sociales y los sistemas de protección social se
enfrentan al reto de dotarse de medios económicos,
administrativos y técnicos necesarios para establecer
estrategias para combatir la pobreza.
Los servicios sociales deben asumir una
doble función de detección, denuncia y
diagnóstico de las situaciones de exclusión
con el fin de que el conjunto de la
sociedad atienda estas situaciones, y de
acoger y atender de manera directa las
problemáticas más urgentes.
Atribuciones de la pobreza: efectos en la comunidad
Las creencias sobre qué causa la
pobreza en el tercer mundo tienen
un efecto en el desarrollo del sentido
de comunidad en los contextos
cotidianos.
Si en una sociedad se explica la pobreza por
causas internas de tipo cultural, disminuye la
probabilidad de acciones antipobreza; y por el
contrario si se da una explicación fáctica
aunque se encuentran fuera del control
directo de los individuos, podrían ser objeto
de influencia, ya sea por acciones electorales,
civiles, o la creación de instituciones
específicas que cooperen por la
transformación social.
Las explicaciones causales de la pobreza tienen
un rol en lo que respecta al desarrollo
comunitario, teniendo en cuenta la participación
y el sentido de comunidad.
Cuando las personas asumen el control de lo que
sucede, actúan en consecuencia para modificar
las situaciones, por tanto resulta relevante
conocer que imágenes se crean en torno a la
pobreza y el lugar de responsabilidad que se le
atribuye.