El oxígeno es un gas incoloro (en
estado líquido y sólido toma un color
azul pálido), inodoro e insípido que
integra el grupo de los anfígenos de la
tabla periódica.
Es un no metal, por lo tanto se
caracteriza especialmente por su
alta reactividad.
El oxígeno constituye el 21%
de la atmósfera de la Tierra en
volumen y puede obtenerse
mediante licuefacción y
destilación fraccionada,
básicamente es un proceso a
través del cual se convierten
gases en líquidos,
manipulando la temperatura y
la presión.
Número
atómico: 8
Peso atómico:
15,9994
Punto de fusión:
-218,79° C
Punto de ebullición:
-182,95°C
El oxígeno es la base de
toda la vida ya que todos
los seres humanos
respiramos, por eso su
importancia.
En el proceso de la respiración, el oxígeno actúa como aceptor final para los electrones retirados
de los átomos de carbono de los alimentos. El producto es agua. El ciclo se completa en la
fotosíntesis cuando se captura la energía de la luz para alejar los electrones respecto a los átomos
de oxígeno de las moléculas de agua. Los electrones reducen los átomos de oxígeno de las
moleculas de agua. Los electrones reducen los átomos de carbono (de dióxido de carbono) a
carbohidrato. Al final se produce oxígeno molecular y así se completa el ciclo. Por cada molécula de
oxígeno utilizada en la respiración celular, se libera una molécula de dióxido de carbono.
Inversamente, por cada molécula de dióxido de carbono absorbida en la fotosíntesis, se libera una
molécula de oxígeno.