Domesticación es el proceso por el cual una población de una determinada especie animal o vegetal
pierde, adquiere o desarrolla ciertos caracteres morfológicos, fisiológicos o de comportamiento, los
cuales son heredables y, además, son el resultado de una interacción prolongada y de una selección
artificial por parte del ser humano.1 Su finalidad es obtener determinados beneficios de dichas
especies.