El producto que vende la Auditoría son sus informes.
Se remiten a las más altas autoridades de la organización.
Es el medio de que se vale la auditoría para dar a conocer su opinión. Es su vehículo de
comunicación.
Ponen de manifiesto si los auditores tienen una visión gerencial de las áreas auditadas o carecen de
ella. Si están realmente capacitados.
Son representativos de la calidad de la auditoría interna en cuanto a: formación profesional, cultura,
estilo, corrección en el lenguaje escrito, etc.
Cada informe es una carta de presentación de la auditoría, los errores de concepto, la falta de
oportunidad de las recomendaciones y la deficiente redacción pueden producirse en cualquier
auditoría y es algo que debe evitarse.